Desde el Sena. En abríl, indecisos mil...
lunes 09 de abril de 2007, 17:16h
Los sondeos de opinión en esta elección presidencial en Francia se parecen cada vez más al hombre del tiempo, ese que siempre se equivoca diciendo que va a llover cuando hace sol y viceversa, mientras reitera con convicción seudocientífica el viejo adagio “en abril lluvias mil”. Los franceses dicen en cambio “Avril, ne te decouvre pas d’un fil”, para indicar que es éste un mes traicionero, indeciso por definición, en el que mas vale no vestirse demasiado de verano. Abríl es pues un mes que invita a la prudencia.
Al afirmar que hay en Francia a dos semanas del voto de la primera vuelta nada menos que 18 millones de indecisos, los Institutos de sondeos -que pretenden reflejar y orientar la opinión- se ponen a la altura de la empírica meteorologia y reconocen su incapacidad a ofrecernos a estas alturas algo mas que una fotografia borrosa y poco fiable de la inmediata actualidad.
Reconocen los especialistas que el uso del teléfono movil por una inmensa mayoria de la población y en particular los jovenes, hace cada vez mas dificil saber lo que piensa la gente, ya que las encuestas se hacen con teléfono fijo. Por otra parte la evolución del voto de extrema derecha en los últimos quince años que ha pasado de 3% a 17%, introduce así mismo otra variable dificil de controlar, pues si el discurso xenófobo de Jean Marie Le Pen, está en cierto modo “normalizado”, ese electorado tiene tendencia a esconder su intención de voto. O sea que a fin de cuentas entre los resultados reales de las encuestas y su extrapolación final la diferencia puede ser enorme y el margen de error considerable, siendo legión los “no sabe” o “no contesta”.
El grado de indecisión del electorado en esta elección presidencial se explica también por la fragmentación de la tradicional bipolarización derecha izquierda. El No en Francia en el referendum de la Constitución europea puso de relieve una compleja división de opiniones en el seno de las corrientes políticas tradicionales. Hubo partidarios del No tanto en la derecha soberanista, como en los socialistas o en la izquierda altermundialista.. De la misma manera en el campo del Si se encontraron los que hoy son adversarios y favoritos de esta elección presidencial: Nicolas Sarkozy y Segolene Royal, o el propio Francois Bayrou. Nadie tiene hoy pues la unanimidad en su propio campo.
A la indecisión ambiente cabe añadir que en esta elección 2007 se han inscrito en el censo electoral 2,86 millones mas de ciudadanos que hace cinco años. Después de los violentos incidentes en los suburbios de París y otras grandes ciudades francesas en 2005, diversas asociaciones lanzaron una campaña para llamar a los jovenes franceses nacidos de la emigración a inscribirse en las listas electorales. Campaña que ha dado sus frutos y cuyo objetivo es evitar una réplica del seismo provocado por la presencia de Le Pen en el 2002 en la segunda vuelta. El problema es que nadie sabe y los especialistas de los sondeos no nos lo dicen, ¿por quien van a votar esos nuevos inscritos? Sobretodo teniendo en cuenta que el electorado Le Pen no es exclusivamente xenófobo, sino que se nutre de un voto anti-sistema.
Diez por ciento de las personas que nacen cada año en Francia, son de padres nacidos en el extranjero. Desde los años sesenta hasta hoy son pues varias las generaciones que tienen acceso al voto y nacionalidad francesa, aunque sus padres sigan siendo emigrantes. El tema de la integración de los franceses nacidos de la emigración, y la igualdad de oportunidades en el acceso al trabajo y a la vivienda se plantea como uno de los temas claves de la sociedad francesa.
Por cierto que una polémica se ha abierto aquí sobre el tema de las estadisticas étnicas. ¿Hay que contar el numero de negros, de árabes, o de judios en Francia? ¿Y porque no el número de franceses de origen portugués, turco, español, italiano, chino, húngaro o armenio? ¿Como luchar eficazmente contra las discriminaciones, en esta sociedad que ha visto crecer en estos ultimos años el fenomeno del comunitarismo? El desafio de Francia es integrar a esos franceses que se sienten hoy discriminados, por la existencia de ghetos que antes de ser religiosos o étnicos son económicos y sociales. La ley francesa prevé hoy por ejemplo el curriculum vitae anónimo, para luchar contra las discriminaciones en la busqueda de empleo. Una ley ha sido necesaria también para sancionar las discriminaciones en la busqueda de una vivienda, o simplemente en el derecho reservado de acceso a clubs y discotecas. Pero las leyes sólo actuan sobre los efectos de la discriminación en ningun caso sobre las causas. Un dia u otro las élites de este pais tendrán que sacar la cabeza de la arena, y dejar de hacer la política del avestruz.
Echamos de menos este tema, entre muchos otros en el ausente debate electoral, que está estrechamente ligado al de la indecisión y el abstencionismo. La no participación ciudadana en las elecciones es una gangrena amenazadora para un Estado de derecho y para toda democracia digna de ese nombre. Ahí se está jugando como será la Francia del mañana.