Sin embargo, el jefe de Estado aseguró que su Gobierno defiende el concepto de consulta previa, aunque consideró que el mismo debe darse preservando los intereses nacionales y no sólo el de un pequeño sector.
“Es decir, cuando se quiera construir una carretera o un gasoducto, si es que los comuneros dicen que no pase, no hay gasoducto, y se quedó sin luz y sin gas Lima, cuando el país es de todos los peruanos”, sostuvo.
El jefe de Estado aseveró que en ningún caso, la norma puede significar el derecho al veto, porque desaparecería el Perú y la unidad de la República.
DEFENDIÓ EL CONVENIO 169 DE LA OIT
En ese sentido, recordó que el Convenio 169 de la OIT señala expresamente que la consulta no significa, “que al final sea imprescindible el consentimiento y la voluntad del pueblo nativo para que se pueda construir una carretera”.
“La ley como ha sido planteada, hay que decirlo claramente, no establece de manera perfecta que no existe el derecho al veto y nosotros queremos que se diga expresamente como lo refiere el manual de la Organización Internacional del Trabajo”, añadió.
Además, dijo que la norma aprobada por el Congreso va más allá del Convenio 169 de la OIT, porque incluye en sus alcances no sólo a las comunidades nativas de la Amazonía, sino a las comunidades campesinas.
SE DEBATIRÁ LA PRÓXIMA SEMANA
Las observaciones hechas por el Ejecutivo serán debatidas la próxima semana por la Comisión de Constitución del Congreso, anunció su presidenta Mercedes Cabanillas.
“Estamos en consulta con los congresistas para ver la viabilidad de hacer una rápida sesión para poder ver si es que vamos a allanarnos o vamos a insistir, o también puede ser (una decisión) mixta, porque se ha dado el caso. Lo que no se puede hacer es una nueva ley, una nueva autógrafa”, adelantó.