El accidente se registró cuando el pequeño autobús en el que viajaban los españoles en las inmediaciones del sitio arqueológico de Pisac, a menos de 30 km de Cuzco, se precipitó por un barranco de unos 300 metros de profundidad.
Hasta el lugar de los hechos se desplazaron bomberos y policías de la ciudad peruana, situada unos 1.100 km al sureste de Lima, que evacuaron a los seis supervivientes, los cinco españoles y el conductor del vehículo.
Un compañero de los afectados, identificado como Hilario Romero, de la ONG Cooperatur, no pudo confirmar a Efe las muertes, pero informó de que los accidentados, procedentes de varias ONGs de España, habían sido trasladados hasta una clínica de la ciudad.
La agencia estatal de promoción del turismo Promperú, por su parte, informó a Efe de que el estado de los heridos es de pronóstico reservado.
Además facilitó la identidad de los mismos: Silvia Albert Cruzana, de 32 años; Dolores Sánchez Pérez, de 46; Alan Boluda Sandojal, de 34; Sergio Cerra Barbero, de 33 años; y Martha Díaz González, de 22.
El consulado general español en Lima también ha podido confirmar el accidente y ha pedido al cónsul honorario español en Cuzco que recabe los datos exactos y las identidades de los afectados, dijeron las fuentes consulares.
En el lugar de los hechos, la fiscalía peruana procedió al levantamiento de los cadáveres, cuya identidad aún se desconoce pero que, según la agencia estatal Andina, tendrían edades de entre 25 y 40 años. Después fueron trasladados hasta la morgue de la ciudad de Cuzco.
Los nueve pasajeros del vehículo estaban en Perú para participar en un proyecto conjunto en la localidad de Quenco, en colaboración con la ONG peruana Sembrando, que preside la esposa del presidente de la República, Pilar Nores.
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