Instituciones menoscabadas

La palabra menoscabar según el diccionario: “Deteriorar y deslustrar algo, quitándole parte de la estimación o lucimiento que antes tenía.//Causar mengua o descrédito en la honra o en la fama.

Dos instituciones que han sido menoscabadas -entre las tantas- en los tiempos de la llamada Revolución Ciudadana: las Fuerzas Armadas y Cancillería. Militares y diplomáticos han sido parte del devenir histórico de los pueblos en todo el mundo y en todas las épocas; ahora, en los tiempos revolucionarios del Socialismo del Siglo XXI, estas dos instituciones históricas no sólo han sido menoscabadas en sus estructuras, sino en algo más profundo: en su importancia, en sus tradiciones, en su honor, etc. lo que ha causado la desmoralización e indignación  de todos sus miembros. Veamos algunos hechos:

El 24 de mayo es la conmemoración cívica más importante de nuestro país porque se selló la libertad tras el triunfo de las tropas patriotas comandadas por el Mariscal Sucre frente a las tropas españolas del Mariscal Aymerich.

Cada año, en esta magna fecha en la “Cima de la Libertad”, de las faldas del volcán Pichincha, lugar en donde se desarrollaron los heroicos combates, se recuerda y se exalta las figuras de Sucre y de Abdón Calderón. Asisten las principales autoridades civiles, militares, cuerpo diplomático; presidida claro está, por el Presidente de la República; en este año el Presidente Correa no asistió, su excusa: “se quedó en la casa armando un rompecabezas con su hijo”.

El 10 de agosto, fecha en que conmemoramos “El primer Grito de Independencia”; esta vez se desarrollaron un sinnúmero de actividades, artísticas, culturales, cívicas; dentro del programa de festejos del Bicentenario de este importante acontecimiento histórico. Cada año en al Campo de Marte de la Escuela Militar “Eloy Alfaro” se realiza una ceremonia castrense importante, se incorpora una nueva promoción de subtenientes, hay  ascensos de Generales y entrega de condecoraciones; a esta ceremonia normalmente y es una tradición que acudan las principales autoridades de gobierno, cuerpo diplomático, Unidades militares, familiares de los graduados, ascendidos y condecorados; esta es otra ceremonia que siempre la ha presidido el Jefe de Estado, esta vez el Presidente Correa tampoco asistió.

Los decretos de ascenso de los oficiales, tradicionalmente los ha firmado el Presidente de la República; este documento llamado “Despachos”, es exhibido en los museos cuando un militar, por sus méritos, heroísmo y hazañas ha pasado a la historia. Ahora el Presidente Correa no firma, sólo lo hace en los grados de oficiales Generales.

Les hago notar que estas pocas “perlas” -de las incontables-, dicen mucho del respeto a las tradiciones  y el honor de una institución histórica que nació con la patria, ahora menoscabada por la  llamada “Revolución Ciudadana” del “Socialismo del Siglo XXI”.