En declaraciones a Catalunya Ràdio, Artur Mas ha admitido que la incorporación del líder democristiano "no está clara", aunque ha dejado claro que sólo habrá 'conseller en cap' si Duran entrase en el gabinete.
Mas ha avanzado que se reunirá con Duran antes de que termine la semana para solventar el interrogante pendiente sobre el futuro político del democristiano.
Ventajas e inconvenientes
El líder convergente ha admitido los puntos fuertes y los puntos débiles que tendría la presencia de Duran en su Govern.
En la parte positiva, que el Ejecutivo catalán tendría "más potencia política", y en la parte negativa, que CiU perdería peso en Madrid en un contexto en que a su juicio se necesita defender con fuerza los intereses de Cataluña.
Tampoco ha confirmado que el nuevo Govern tenga un conseller con rango de portavoz, al igual que ha pasado con el segundo tripartito, porque "la opinión del presidente es muy determinante".
Entre los compromisos que ha reiterado este jueves, limitar a un máximo de doce el número de consellerias y reducir un 30% el número de altos cargos de la Generalitat.
Abordando otras cuestiones, Artur Mas ha replicado este jueves al ministro de Presidencia, Ramón Jáuregui, que es el PSC quien debe decidir sobre su investidura. En una entrevista de Europa Press, Jáuregui recomendó al PSC facilitar la investidura de Mas porque permitir que "no tenga que estar pendiente de posiciones extremas puede ser inteligente".
"Es lógico que el PSOE tenga opinión, pero la decisión la debe tomar el PSC a través de sus estructuras", ha respondido Mas.
Tras calificar de correcta y constructiva la actitud de los socialistas catalanes en los contactos que han mantenido, Mas ha afirmado comprender que puedan obstaculizar su investidura en primera votación, pero no le ve sentido a que la impidan en segunda vuelta.
A falta de que este jueves o viernes le llame el presidente de la Generalitat en funciones, José Montilla, para concretarle la fecha de la configuración del nuevo Parlament, el objetivo de Mas es que el 3 de enero ya esté en marcha su Govern.
Desea que PSC y ERC se rehagan
También se ha referido al descalabro electoral del PSC y ERC, y ha deseado que puedan rehacerse y salir adelante por respeto a la pluralidad y las sensibilidades distintas que hay en la sociedad. "Pretender acabar con el adversario es un error", ha defendido.
Sin embargo, ha admitido que le hubiera gustado que socialistas y republicanos lanzaran este mismo mensaje cuando CiU perdió la Generalitat y la acusaban de ser una "anomalía".
"Ahora se dan cuenta que lo de CiU no era un invento que se daba cuando había una persona brillante al frente como Jordi Pujol, sino una realidad que conecta con las maneras de sentir el país", ha concluido.
La crisis creada por los controladores aéreos en este puente de La Purísima ha sido otra de las cuestiones sobre las que se ha pronunciado el próximo presidente de la Generalitat. Artur Mas ha dicho que él hubiera actuado "más o menos" como el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero para hacer frente a la huelga de los controladores aéreos.
Así, ha asegurado que él hubiera aplicado la "firmeza" que ha observado en el Gobierno, aunque considera que el Estado es culpable por haber cedido durante años a las presiones de este colectivo.
"El Estado es quien ha engordado y alimentado este 'lobby'", ha lamentado Mas, quien ha destacado que los controladores son personas que, pese a la importancia de su trabajo, no trabajan muchas horas y que cobran salarios muy altos. Dada la importancia de su trabajo, Mas ha expresado su preocupación por la "irresponsabilidad" con la que han actuado.
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