Bruselas pretende reforzar la protección de las denominaciones de origen

La Comisión Europea ha presentado un paquete de medidas destinadas a los productos agrícolas de calidad de la Unión Europea que tiene entre sus objetivos reforzar la protección de las denominaciones de origen europeas, de la que se benefician ya 140 productos españoles. Bruselas confía con esta iniciativa hacer más cercana la política de calidad comunitaria a los agricultores y consumidores.

Entre los objetivos de estas modificaciones está racionalizar algunos de los instrumentos disponibles a nivel comunitario, como las denominaciones de origen y las indicaciones geográficas, para "hacerlos más coherentes", corregir la falta de información de los consumidores y "simplificar" la aplicación de las normas, según fuentes comunitarias.

También permitirá aunar bajo un solo marco disposiciones jurídicas hasta ahora dispersas y cubrir así conjuntamente todo los aspectos de calidad, desde las normas mínimas hasta los productos más específicos, informa ep.

El comisario de Agricultura, Dacian Ciolos, ha destacado la diversidad de la producción agrícola europea, los conocimientos técnicos de los agricultores y la riqueza de sus suelos y zonas como valores que deben protegerse. "Los agricultores, que sufren las presiones de la crisis económica, de la concentración de la capacidad negociadora minorista y de la competencia mundial, necesitan herramientas para informar mejor de sus productos a los consumidores", ha declarado.

La propuesta de Bruselas apuesta por "consolidar" el sistema insignia de denominaciones de origen protegidas y de indicaciones geográficas protegidas (DOP e IGP), en el que están registrados cerca de un millar de alimentos europeos, entre ellos 140 españoles. También aboga por revisar el sistema de especialidades tradicionales garantizadas (ETG) y establecer un nuevo marco para la creación de expresiones de calidad voluntarias.

Además, el Ejecutivo comunitario es partidario de "racionalizar" la adopción de normas de comercialización --incluida la facultad de ampliar el lugar del etiquetado de producción de acuerdo con las características específicas de cada sector agrícola-- y alinearlas con el plano internacional.

Otra de las ideas de la Comisión es establecer nuevas directrices sobre buenas prácticas para los sistemas de certificación voluntarios y sobre el etiquetado de productos que utilicen indicaciones geográficas como ingredientes.

Bruselas cree que con este documento sienta las bases de una política más coherente y resume tres años de consultas con las partes interesadas. El comisario Ciolos presentará los detalles de esta propuesta a los ministros de Agricultura de  la UE en la reunión que mantendrán el próximo lunes en Bruselas.

En paralelo a la propuesta de nuevas medidas, la Comisión ha insistido en que seguirá "examinando los problemas" que afrontan los pequeños productores para participar en los sistemas de calidad comunitarios y también las dificultades de los productores de montaña para comercializar sus artículos.