Alguna vez leí una frase que decía más o menos así: Cuando un dedo señala la luna, el idiota mira al dedo.
Hace unos días reflexionaba sobre una campaña vacía de propuestas, sin respuesta alguna a nuestras problemáticas cotidianas.
Tal vez se utilizó, al buscar captar votos, un concepto equivocado, tendiente a creer que la gran mayoría de los ciudadanos no éramos capaces de ver la luna.
Aquellos que pensaron así fueron los que miraron el dedo que señala y al tomar como punto de partida este error equivocaron el rumbo y terminaron por perderse.
Este dedo acusador sólo se ocupó de señalar el falso camino de la descalificación del adversario, malgastando esfuerzos en ocuparse del otro sin poder ver que no hablaban de sus propuestas, un detalle, no menor, teniendo en cuenta que era esto lo que la mayoría de los ciudadanos queríamos escuchar.
La segunda vuelta, les brinda una segunda oportunidad, no la desperdicien.
Cada uno de nosotros, ciudadanos comunes, esperamos propuestas, respuestas concretas sobre el qué hacer para que nuestra ciudad sea segura, donde hasta el más humilde de sus habitantes , pueda educarse, curarse y vivir dignamente.
Los números pueden reflejar triunfos y fracasos, según como los miremos, un 25% a favor tiene, como contracara, un 75% en contra. Si logran hacer las dos lecturas y tienen la humildad de preguntarse en qué nos equivocamos tal vez encuentren las respuestas que les permitan corregir errores y responder a nuestros interrogantes.
Sabemos qué ha hecho y qué piensa hacer el gobierno central, pero nos falta saber qué hará nuestro jefe de gobierno en este “ombligo” del país que llamamos Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Pretendemos un Jefe de Gobierno capaz de responder con dignidad y autonomía a los mandatos del único soberano: EL PUEBLO DE LA CIUDAD.
Creer que no somos capaces de ver la luna es subestimarnos y tropezar , por segunda vez, con la misma piedra.
Si (
No(
