La UE alejará a comisarios del poder de 'lobbies' tras mandato

La Unión Europea prepara un endurecimiento del código ético de los comisarios para restringir su incorporación a los 'lobbies' una vez acabado su mandato. La normativa, que estará lista en las próximas semanas, ampliará a 18 meses el tiempo que un exmiembro de la Comisión deberá respetar antes de entrar en nómina de un grupo de presión que opere en su antiguo campo. La modificación del reglamento llega menos de un año después de que se conociera que todo un elenco de antiguos integrantes del Gobierno comunitario habían sido fichados por distintas empresas con fuertes intereses en Bruselas.

Aunque todavía no se conocen todos los detalles del nuevo código de conducta, José Manuel Durao Barroso acudió el jueves al Parlamento Europeo para desgranar sus líneas maestras. El punto principal es que los ex comisarios deberán esperar 18 meses -el plazo actual es de un año- para poder trabajar en un 'lobby' especializado en su área. Durante esta moratoria los antiguos miembros de la Comisión sí podrán acceder a grupos de presión de otros sectores sin limitaciones.

El Ejecutivo comunitario considera que ampliar más las restricciones para que un comisario pueda incorporarse a un 'lobby' restaría atractivo al puesto y reduciría las posibilidades de contar con los mejores. En Bruselas se recuerda que muchos países no utilizan códigos de conducta de estas características. La Comisión adoptó el suyo en 2003 después de analizar las distintas normativas aplicadas en la comunidad internacional.

Bruselas acoge después de Washington al mayor número de 'lobbies' del mundo. La propia Comisión decidió en 2008 poner en marcha un registro para dotar de mayor transparencia a sus actividades. En total, se han inscrito alrededor de 2.700 firmas que, de acuerdo a distintos cálculos, emplean a unas 15.000 personas.

La reforma del reglamento ético también incluye otras modificaciones como la prohibición de que los comisarios puedan contratar a familiares directos en calidad de asesores. Aunque en principio no se ha dado ningún caso, el código pretende evitar cualquier tipo de favoritismo en los cargos de confianza. Otras situaciones que se enmarcarán dentro de un apartado referido a la «hospitalidad» de empresas y grupos, especialmente los viajes, quedarán también claramente delimitadas con líneas rojas.

Los comisarios, según establece una normativa específica, sólo pueden aceptar regalos de menos de 150 euros. Los que superan esta cantidad no se rechazan, sino que pasan a manos de la Comisión que los expone en sus instalaciones o incluso los dona a asociaciones caritativas. El Gobierno comunitario tiene un comité ético que analiza todos los conflictos de intereses que afectan a la institución.

Rechazado

Con toda esta reforma, Barroso sale al paso de las críticas vertidas después de que miembros de su anterior CE dieran el salto a la empresa privada poco después de dejar sus puestos. El caso más sonado fue el del comisario de Mercado Interior, el irlandés Charlie McCreevy. El comité ético tuvo que rechazar por primera vez en su historia su incorporación a un banco británico porque en su anterior puesto era responsable de la regulación financiera.

La polémica también destapó que los excomisarios cobran un 'complemento de transición' durante los tres años posteriores a su salida el Ejecutivo. El sueldo asciende a un mínimo de 96.000 euros por ejercicio. Este dinero, en cierta manera, está destinado a cubrir el tiempo que puede permanecer buscando un trabajo por las limitaciones del código de conducta. Mientras están en su puesto, cobran 20.000 euros mensuales sin tener en cuenta las ayudas por residencia