www.diariocritico.com

ENTREVISTA. El presidente de los Gremios de Editores de España, contra la piratería

Antoni Comas: 'He visto en algún despacho de la Administración fotocopiar un libro entero'

Antoni Comas: "He visto en algún despacho de la Administración fotocopiar un libro entero"

"¿Por què Barcelona no puede ser algún día la capital europea de la edición en inglés?"

viernes 11 de marzo de 2011, 18:51h

Antoni Comas (Barcelona, 1961) preside desde enero la Federación de Gremios de Editores de España. El sector factura 4.000 millones de euros al año, ocupa a 30.000 personas y produce anualmente 330 millones de volúmenes.

Lleva más de 26 años de experiencia editorial a sus espaldas, pues Antoni Comas fundó con su padre y un hermano Tibidabo Edicions, un sello editorial que ya lleva publicados más de diez mil títulos. Fueron, además, pioneros en la compatibilización del formato papel con las nuevas tecnologías al presentar un diskette junto al volumen. Antes de encabezar el lobby editorial ha presidido durante los últimos cinco años a sus colegas catalanes. - ¿Con qué ánimo optó al cargo y qué aporta usted al mundo editorial desde su condición de presidente del gremio de Cataluña? El sector editorial catalán representa el 60 por ciento del conjunto de España. Esto de por sí ya es importante y, simplificando, diría que aportamos sentido común. Pero por otra parte, el editor forma parte de la cultura occidental y por tanto su punto de vista influye en cómo se escriban las cosas. Por ejemplo, a la hora de redactar la palabra "submarino" en una enciclopedia, si el editor es catalán hará mención de Narcís Monturiol, mientras que si es de fuera hablará de Isaac Peral. Esto es un elemento diferencial. - ¿Se mantiene también en Cataluña el liderazgo mundial en edición en lengua castellana? - Esto, en Cataluña, cuesta entenderlo. Lo que cuenta es la industria. Es compatible editar en catalán con publicar también en castellano para todo el mundo. ¿Y por qué no podemos ser también la capital editorial europea en lengua inglesa? - Dicen que ahora notan ustedes la crisis, que en los primeros meses la gente dejaba de salir a cenar pero que no renunciaban a un libro. - Es cierto, en 2009 no acabamos de notar la crisis, pero en 2010, sí. En anteriores crisis, la industria editorial crecía menos, pero esta vez la facturación ha bajado un 8 por ciento. La crisis alcanza ahora a la renta disponible de profesionales que compraban libros, salían a cenar… Muchos resuelven esta necesidad en las bibliotecas públicas, que han aumentado mucho las consultas. - ¿Se publica demasiado en España? Hay libros que ni siquiera se desempaquetan en las librerías. - Sí, es posible que haya títulos inflacionistas respecto a la población lectora, pero ¿hay alguien que publique para perder? Esperan ganar dinero… En Nueva York la rotación de stocks es de horas. Puedes tener expuesto un libro en una estantería y si no vende lo cambian enseguida por otro. Es muy fácil decir que se publica demasiado porque estamos en torno a los 80.000 títulos anuales, pero miras alrededor y aún publican más. Somos la cuarta potencia editorial de Europa, detrás de Gran Bretaña, Alemania y Francia. Evidentemente estoy hablando de ventas, porque la impresión se ha podido hacer en China o en otros países fuera de la Unión Europea, una tendencia que va creciendo. - ¿Y las instituciones que les hacen la competencia? Editan y a veces esos libros no salen del almacén. - Yo creo que la crisis económica corregirá este hecho porque no hay dinero para malgastar en libros sin interés. ¡Hacen trampa cuando dicen que publican temas que no nos interesan a las editoriales! El problema no son los títulos, sino los cachés que establecen a algunos autores a los que van a buscar y que luego no quieren escribir para nosotros. ¡Si les dan 6.000 euros, independientemente de que se venda o no el libro, ¿quién viene luego a nosotros? Es una competencia desleal que nos está haciendo mucho daño. Y además lo estamos pagando todos los ciudadanos. - El mundo de la cultura en general reclama y vive de subvenciones. En eso parece que ustedes son menos pedigüeños. - Sí que hay subvenciones, pero comparado con las del cine o el teatro cuantitativamente la cifra es una tontería. Pero hay que entender que un euro invertido en el mundo del libro tiene un mayor impacto sobre la economía y más valor añadido que otros sectores de la cultura. - Ustedes no forman parte del "sindicato de la ceja", los "cómicos de ZP" y no les miman tanto desde el Gobierno español porque no se manifiestan. - Los autores están más sometidos a las empresas que no esos otros profesionales que usted dice del "sindicato de la ceja" que van a pedir al ministerio. Ahora sí que tendremos que ir porque la piratería nos está perjudicando mucho. ¿Queremos ser un país de la UE, moderno, o un país de pandereta? El valor del libro como valor cultural tiende a ser cero porque hay quien piensa que la música o el libro han de ser gratis. Esto nos ha hecho mucho daño, como también la llamada sentencia Padovan que considera que si uno es un profesional no tiene que pagar el canon por hacer fotocopias. Yo he visto en algún despacho de la Administración ¡fotocopiar un libro entero! En Alemania y en Francia está bien legislado esto, ¿y aquí no? Lo de las fotocopias es especialmente grave en libros científico-técnicos. - ¿No es un problema ir de la mano de alguna otra sociedad de gestión como SGAE, que tiene una imagen confiscatoria? - Yo quiero que se me valore por lo que soy, no por los demás. La pregunta es: ¿nuestros hijos realmente necesitan tener dos mil canciones en sus i-pod? Quizás no hemos sido capaces de inculcar a los jóvenes la educación en valores que, entre otras cosas, es respetar el derecho de los autores a que no se piratee su obra. - La Ley Sinde finalmente salió adelante… - Es un primer paso, y aunque no nos guste plenamente hay que continuar luchando. - Hubo cambios curiosos en el posicionamiento de algunos partidos. - Todos estaban de acuerdo en el diagnóstico, aunque a algunos les era complicado asumir el coste político de la ley, otros buscaban desgastar al Gobierno y algún otro hacía un cierto mix. - A ustedes los salvó CiU. - Aun conociendo el diagnóstico, no se sabía qué fármaco administrar. Al final, CiU entendió el problema, hizo un paquete y lo sacó adelante con PSOE y PP a cambio de otras cosas. - Valore los dos años de experiencia del libro electrónico, del e-book.¿Es usted de los que piensan que se comerá al libro en papel? - Habrá una larga convivencia entre los dos formatos. Es como aquel dicho "video will kill the radio star" ("El video matará las estrellas de la radio"), cosa que no ha ocurrido. El e-book representa en Estados Unidos un 3 por ciento, aproximadamente, y en España, un 1 por ciento. Eso sí, hay mucho recorrido por delante, pero ¿de aquí a cincuenta años, qué pasará? No obstante, pensamos sólo en la literatura, pero desde hace años hay libros científico-técnicos que sólo están accesibles en formato digital. - ¿Y el autor, cómo los dedica? ¿Con una firma electrónica? - Con la web 3.0. El libro electrónico pierde un elemento singular de la relación autor-lector como es la dedicatoria. Con ésta se presupone que has tenido al autor a mano y que es una dedicatoria única.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios