La hipotética candidatura de Chacón para sustituir a Zapatero abrirá aún más brechas en el PSC

De momento, el líder del PSC en el Parlament, Joaquim Nadal, ha recordado a su compañera de partido y ministra de Defensa, Carme Chacón, que si quiere estar en las primarias para ser candidata a la Presidencia del Gobierno debe buscar apoyo entre la militancia y no entre las federaciones del PSOE y sus aparatos. "Votan los militantes, no votan las delegaciones", ha advertido en rueda de prensa desde la cámara catalana. Y cuando se hacen este tipo de advertencias se entiende bien que el destinatario de las mismas no suscita, precisamente, adhesiones inquebrantables. Con todo, Nadal ha evitado posicionarse: "Ni opino ni tomo partido porque no lo haré hasta que las primarias se convoquen", lo que ocurrirá después del 22-M, ha argumentado. "Queda claro que en el PSC, por razones de proximidad, habrá simpatías mayoritarias por Carme Chacón", ha añadido el ex alcalde de Girona y ex candidato a la Generalitat en 1995, pero ha dejado claro que con la "descripción de este hecho" no se está postulando a favor de nadie. Por su parte, en una entrevista del diario digital de la Diputación de Barcelona La Malla recogida por Europa Press, el viceprimer secretario y portavoz del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado que el anuncio de José Luis Rodríguez Zapatero de no optar a la reelección no desmonta la estrategia del PSC. Aunque el PSC había insistido varias veces en que su objetivo era que la campaña del 22-M -en que se juega su poder municipal- fuera en clave local y no sobre la sucesión, Iceta ha considerado ahora: "Las primarias del PSOE serán después de las municipales, que es lo que nosotros queríamos". "Habíamos pedido que este tema se cerrase, y Zapatero lo ha cerrado a su manera, diciendo que no se volvería a presentar" pero dejando claro los plazos sobre su sucesión, ha asegurado. Al igual que ha hecho Nadal en rueda de prensa, Iceta ha diagnosticado que "el PSC no tiene papel en las primarias" ya que el protagonismo no lo tienen las direcciones de los socialistas catalanes y de las federaciones del PSOE, sino la militancia. Cabe considerarse, no obstante, que Iceta se ha salido por la tangente, puesto que aun el día 28 de marzo, cuatro días antes de la comunicación de renuncia de Zapatero, el propio Iceta señalaba que no era un buen momento para abordar la sucesión del actual jefe de Gobierno. "No es momento de indertidumbres", señalaba. Ahora, por mucho que se afane en precisar que la cuestión se abordará una vez superadas las elecciones locales del 22 de mayo, sabe perfectamente Iceta que la lucha está sobre la mesa. Política e informativa.