Intocables

Es maravilloso. Después de escuchar las promesas y los estudiadísimos programas de los partidos políticos podemos asegurar que los problemas que tenemos desaparecerán como por arte de magia. En realidad algunos políticos son auténticos magos que sacan de la chistera sueños que transforman la realidad. Según todas las encuestas Juan Vicente Herrera ganará de forma abultada, e incluso aumentará el número de procuradores en las Cortes. Lo cual demuestra que, contrariamente a lo que se dice, el poder no desgasta. Que lo que quema, como diría Andreotti, aquel político democristiano italiano, es la oposición. Y es que aquí, en Castilla y León, los que vienen gobernando casi un cuarto de siglo, los del PP, los de la derecha, se creen que no tienen culpa de nada de nuestras desgracias. El responsable de todo -lo tienen claro- es Zapatero. Sólo faltaba la cifra ya cercana a los cinco millones de parados para convertir al leonés de Valladolid en un monstruo de siete mil cabezas. Los parámetros del paro, el déficit, las políticas sociales, la despoblación o la sangría de jóvenes de Castilla y León no importan porque Zapatero siempre los tiene peores. Aquí las urnas, según todos los indicios, no van a examinar las políticas de Juan Vicente Herrera y su gobierno. Aquí prima más ‘el gran mensaje’ de que la Junta tiene que administrar como sea el Duero, aunque sea a medias con el Gobierno central. Me refiero al río Duero, no a Caja Duero/España, que eso ya es agua de otra cesta. Aquí, si no intervenimos en los negocios  de la Cuenca Hidrográfica del Duero, que no se va a poder hacer por imperativo del Tribunal Constitucional, es como si no existiéramos. Estos días pasados, en una de sus múltiples y kilométricas entrevistas, Herrera dijo que “la gestión del Duero es algo fundamental para Castilla y León”. No me había dado cuenta yo de eso. ¿Es que con los socialistas el agua llega más sucia? ¿Es que llueve menos? ¡Vamos ya! Herrera ha asegurado también que “el debate de la capitalidad no está en la calle; no pienso reformar el Estatuto”. O sea, que la gestión del Duero es comentario único y diario en los bares; en los colegios los niños ni se preocupan de las matemáticas y en las consejerías los funcionarios no paran de hablar del romance del Duero de Gerardo Diego, igual que los  médicos en los hospitales. En Castilla y León no se habla de otra cosa que de la administración del Duero.  Y es que como al omnipotente José Antonio de Santiago-Juárez, se le meta una cosa en la cabeza, eso es lo que vale; lo demás es agua del Duero para borrajas. Pues no. A la gente le preocupa más la gestión que ha hecho la Junta con Caja Duero/Caja España, que han terminado, o pueden terminar, gobernadas desde Málaga. O de Caja Burgos, que ya se gestiona desde Sevilla. O de Caja Ávila o Caja Segovia, que ya se gerencian desde Madrid. El propio José Antonio llegó a decir que “fusión de cajas sí o sí”. Es más, según EFE, De Santiago-Juárez expresó estar “convencido de que tanto el proceso de fusión, como el proceso de integración en Banca Cívica en el que se encuentran inmersas Caja Burgos, Caja Segovia y Caja Ávila dará como resultado que Castilla y León se convierta en la primera Comunidad pluriprovincial que ordena su sistema financiero para hacerlo más potente y comprometido”. ¿Qué dice ahora después del gran fracaso? ¿Nadie pide responsables del desastre? ¿Herrera se lava las manos? Ahora Herrera dice que “nuestras cajas serán los bancos y entidades que vengan a servir”. ¿Se puede decir una tontería mayor? Ya sabemos que una tontería es una tontería lo diga Agamenón o su porquero. ¿Desde cuándo los bancos se dedican a servir y no a servirse? ¿Es más trascendental la gestión de la Cuenca del Duero que la del ahorro de la tierra? ¡Vamos ya! Los gobernantes viven de la falta de memoria. Por eso vamos a recordar algunas cosas. Por ejemplo: ¿ Qué fue del músculo financiero de Herrera? ¿Y qué pasó con el Comisionado de I+D+i, tan crucial para el futuro de Castilla y León? ¿Qué ha sido del Comisionado del español, clave para nuestro porvenir? Vuelvo a la despoblación: ¿Qué resultados está dando la Agenda de la Población? Que sepamos cada día vivimos menos en esta tierra, y encima más viejos. Los jóvenes se van con la música a otra parte visto lo visto. Diariocrítico, con las estadísticas en la mano, lo dejó claro hace unos días: en los 24 años de gobierno popular -Aznar, Posada, Lucas y Herrera- ha perdido 110.000 habitantes mientras España ha aumentado en 9 millones. Y esa es la clave de bóveda de una política. Si nos quedamos sin gente, lo demás es una anécdota. ¿ Para que queremos en los pueblos parques infantiles si no hay niños y calles asfaltadas si no pasa nadie? Esa es una cuestión trascendental, y el PP lleva muchos años dando palos de ciego y renovando su cadena de promesas  incumplidas. No sé si seguir, porque como la culpa de todo la tiene Zapatero… Herrera es un líder intocable, un ejemplo para Rajoy. Sus conmilitones le adoran, sus votantes se le entregan, la crítica no sabe que lisonjas dedicarle…Herrera llega a conseguir en las encuestas cinco procuradores más que en las anteriores elecciones, superando al otrora gran Lucas. Herrera no es de este mundanal ruido. Por eso no ha debatido con Óscar López. Un consejero de Herrera llegó a decir: “¿Cómo se atreve Óscar López a pedirle un debate a Herrera? ¿Qué méritos ha hecho? ¿Cómo intenta compararse con Herrera”. Mis propios oídos lo oyeron. Entonces caí en la cuenta de que criticar a Herrera era una locura, casi una afrenta. Y es que en el PP hay mucho demócrata camuflado, o mejor dicho, demócratas convencidos sólo porque los tiempos son los que son. Por eso ganarán, pero esos concretamente a mi no me convencerán. Óscar ha asegurado que llegará a ser presidente de la Junta. No se ha atrevido a decir cuándo. Desde luego ahora no. Y si los resultados son los que dicen las encuestas, debe prepararse para un invierno siberiano. Esto, después de tanto tiempo es como un Régimen, y eso no se desmantela así como así. Cuantos más viejos, más voto conservador, y cuantos menos jóvenes, menos votos progresistas. López lo tiene crudo, pero si se queda aquí, y llega a ser presidente de la Junta, me apunto a promover una cuestación para hacerle un monumento en la frontera con Madrid, ya en tierras de Castilla y León. ¿Qué va a hacer Óscar López para acabar con lo que él ha calificado de “estómagos agradecidos”. ¿Cómo va a eliminar el clientelismo, el amiguismo, la ausencia mediática de crítica y el distanciamiento del votante? Tendrán que ser los del ‘Movimiento 15-M’, los campamentos ciudadanos de gente cabreada con estos políticos y esta política los que mantengan la esperanza de que algún día esto cambie. No hay derecho a que en esta campaña electoral nadie haya hecho planteamientos concretos, realistas, contra los problemas. Ni un sólo proyecto pegado a lo que preocupa a la gente. Ni siquiera un planteamiento de solución a alguno de los muchos problemas. Sólo partido, partido y partido, generalidades y estrategias propagandísticas para ganar votos. Si IU entra en las Cortes habrá una corriente de aire fresco. Pequeña, pero significativa. Y si López logra vender el piso de Madrid y viene a vivir a Castilla y León, la cosa les seguirá siendo igual de difícil para arrebatarle el poder el PP, pero por lo menos habrá otra dinámica, otro espíritu opositor. Y se necesita para que la democracia gane calidad en esta tierra llena de aves de rapiña, córvidos y buitres leonados. Aniano Gago. Periodista.