Heliodoro, al Consultivo

Entre los principales damnificados por el naufragio electoral sufrido por el PSOE en Castilla y León figuran lógicamente en destacadísimo lugar los dos alcaldes de capital que tendrán que despedirse del cargo tan pronto se constituyan las nuevas corporaciones locales. Sin embargo, cada caso es distinto y no es igual la situación política del palentino Heliodoro Gallego que la del leonés Francisco Fernández.   Fernández no ha sabido rentabilizar políticamente las multimillonarias inversiones realizadas por el gobierno Zapatero en la capital del Bernesga. Y además, como secretario provincial del PSOE, es el máximo responsable del batacazo que se han dado los socialistas leoneses en las elecciones autonómicas y en otros muchos municipios. Su regreso, sin recoger siquiera el acta de concejal, a ese bien remunerado puesto de trabajo en Caja España al que se refería ayer El Mentidero, estaría mas que justificado. Lo mismo que todo el mundo entendería que presentara la dimisión de su cargo orgánico de secretario del PSOE de León.   El caso de Gallego es distinto. Durante 16 años, separados en dos etapas, ha sido un gran alcalde al que no se puede despedir por la puerta falsa. No sólo ha sido durante años un referente municipal para el PSOE de Castilla y León, sino que su trayectoria le llevó a presidir durante un tiempo la Federación Española de Municipios y Provincias, que viene a ser lo de ser el alcalde de todos los alcaldes españoles.   Ese enorme bagaje no puede echarse en saco roto. De ahí que por una vez, y sin que sirva de precedente, El Topillo se permita sugerir a quien corresponda que ponga en valor la figura política del todavía alcalde de Palencia. No se trata de rendirle ningún homenaje ni de buscarle ningún retiro dorado, sino de ubicarle en algún puesto institucional donde se aproveche su conocimiento y experiencia en beneficio del interés público. El Consejo Consultivo puede ser un destino a la medida de Heliodoro Gallego.