Rubalcaba ha garantizado la estabilidad parlamentaria para que Zapatero gobierne hasta 2012

En la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros de este viernes, Pérez Rubalcaba ha estado más cítrico que de costumbre, pero con mejor humor. Dónde va a parar. Ha contestado incluso a preguntas sobre si había sentido sobre su ser '14 dedazos' en este Consejo; pero no, ninguno de los ministros ni vicepresidentes le ha felicitado por su proclamación de 'Zapatero in péctore': "No me han dicho nada… Y lo digo con dolor, con sufrimiento. Ahora mismo voy a hacer 15 llamadas" (sic y risas al canto). Más allá de la fina ironía rubalcabesca, el vicepresidente ha revelado que Zapatero puede seguir en La Moncloa hasta marzo de 2012, porque el Gobierno tiene garantizada la "estabilidad" parlamentaria para agotar la legislatura. Es más, Rubalcaba cree que conseguirá aprobar los Presupuestos Generales del Estado para 2012 (de todo eso habló él mismo con Artur Mas en desvelado-secreto la pasada semana en Barcelona), y de eso habló al parecer Zapatero con el peneuvista Iñigo Urkullu en una cena hace unos días. Pero eso sí, dice que no le ha prometido a Mas ningún tipo de pacto pesetero: "Son encuentros normales; en ningún momento se habló de pacto fiscal", Rubalcaba dixit. "Es normal que hay reuniones con los grupos parlamentarios y con los gobiernos autonómicos, porque el Gobierno quiere agotar la legislatura para aprobar las grandes reformas que están en marcha", como la de las pensiones, o como la reforma laboral, la cual quedará pulida el próximo viernes, 10 de junio, para enviarla al Parlamento, aún sin acuerdo con los agentes sociales. Precisamente, a la reforma laboral ha dedicado mucho tiempo este Consejo de Ministros, que ha escuchado un informe del titular de Trabajo, Valeriano Gómez. Será una reforma por decreto, que se basará en lo que se habló hasta esos "quince minutos" que les faltaron a los agentes sociales para llegar a un acuerdo, antes de que los empresarios, por razones desconocidas aunque predecibles, decidieran unilateralmente romper las negociaciones. Rubalcaba, el calesero La ironía de Rubalcaba tomó este viernes por blanco al líder de la oposición, Mariano Rajoy, y a sus propuestas de austeridad en las comunidades autónomas donde gobernará el PP; es decir, en casi todas. Para descalificar el conjunto de propuestas, Rubalcaba cogió al vuelo una muy concreta: la de la utilización de 'coches de incidencias' para reducir el parque móvil. Gracia no le falta, es verdad, y así, como un maestro, de forma didáctica se dirigió a Rajoy: "Pero si ya había coches de incidencias cuando había coches de caballos…", son soluciones "antiguas e imaginativas" y más "propias del siglo XIX", y la más original de todas: "Me gustaría verle llegar al Congreso en el mismo coche que Soraya Sáenz de Santamaría". Claro que al PP le gustaría verle llegar a él en el mismo coche que Carme Chacón. El pepino español Por otro lado, el vicepresidente ha confirmado la buena disposición de la canciller alemana, Angela Merkel, se encuentra en una excelente disposición para reparar el daño hecho a la huerta española por el espinoso asunto del pepino. "Alguien tiene que pagar el daño cuasado y estamos explorando todas las vías". Hay una primera responsabilidad de la autoridades de Hamburgo, y "esa responsazbilidad se puede sufragar por la Unión Europea, que tiene partidas para ello, pero que habrá que crear alguna nueva, porque con las que hay no llega".   Lea también: El Gobierno da un 'tijeretazo' a los sueldos de los banqueros Ultimátum de la UE a España para que controle los 'sueldazos' bancarios Referencia del Consejo de Ministros