Berlusconi llamó a Merkel "culo gordo" en una conversación telefónica grabada

En estos momentos Italia no habla de otra cosa. Y además, el caso es de lo más enrevesado. Resulta que las escuchas donde Silvio Berlusconi habría insultado así a Angela Merkel, llamándola "culo grasiento que no hay quien se lo tire", se publicaron en el periódico 'Il Giornale', propiedad de Paolo Berlusconi, hermano del primer ministro. Sería Paolo y no Silvio quien tendría problemas con la Justicia por publicar esas conversaciones por ser ilegales. Pero es que esas escuchas no se centran en el hermano del dueño del periódico, sino en el entonces (2005) líder del partido Demócratas de Izquierda (DS), Piero Fassino, y el presidente de la aseguradora Unipol, Giovanni Consorte. ¿Por qué? Pues porque en una conversación telefónica hablaban sobre cómo financiarse a través de un banco, así que resultó muy interesante para la derecha política y mediática y se publicó en 'Il Giornale'. Ahora bien, Silvio Berlusconi estaría acusado de participación en la revelación de secreto profesional, aunque el responsable sería su hermano Paolo por difundir las escuchas en su periódico. La charla entre Fassino y Consorte estaba aún en manos de la Policía italiana para investigar posibles irregularidades, pero llegaron a la opinión pública a través de este periódico. Pero en esas escuchas hay más material delicado. En ellas también aparecería Berlusconi llamando "culo grasiento que no hay quien se lo tire" a su ahora colega alemana Angela Merkel, dentro de una conversación con un editor de prensa. En esas charlas también, hay que recordar, llamó a Italia "país de mierda" y que le daba "ganas de vomitar". Ahora bien, nadie ha escuchado realmente esas supuestas palabras y aunque en Alemania se comenta mucho el rumor, no se ha terminado de confirmar al cien por cien, e incluso algunos periódico se refieren a estas palabras pero no las han reproducido literalmente por el mal gusto de las mismas. - Lea también: Berlusconi se escaquea del bunga bunga... Berlusconi se quiere ir de su "país de mierda"