La Asamblea rechaza las enmiendas del PSOE e IU a los Presupuestos de 2008

La consejera de Hacienda, Engracia Hidalgo, aprovechó para denunciar que el Gobierno de Zapatero sólo lleva ejecutado el trece por ciento de sus inversiones de 2007 en Madrid y para criticar que haya tenido que "calzar 500 millones de euros en los Presupuestos del Estado para garantizarse el apoyo de sus socios en el Parlamento".

El portavoz de Presupuestos del PSOE, Adolfo Piñedo, sostuvo, en cambio, que las ayudas a vivienda y las partidas para integración de inmigrantes crecen en los Presupuestos de la Comunidad gracias a que suben las aportaciones del Estado, y aseveró que el PP en Madrid se ha vuelto "nacionalista cheli" y "dice lo mismo que Carod-Rovira".

Piñedo, que despertó la hilaridad de los parlamentarios con una parábola sobre "plátanos" y "manzanas" referida a la financiación autonómica, pidió la devolución de los Presupuestos de la Comunidad por considerar que suponen un "paso atrás" y un "ajuste irracional del gasto".

Según argumentó, a pesar del aumento de población, el presupuesto consolidado (el que incluye las empresas públicas) no crece en términos reales, lo que significa que no servirá para hacer frente a los compromisos adquiridos, atender las nuevas necesidades y hacer frente a viejos problemas.

En su discurso, el portavoz socialista se empeñó en demostrar que Madrid no es la "locomotora" económica de España, que los presupuestos regionales no son "austeros", que las inversiones "bajan", que la deuda de las empresas públicas "aumenta" y que no se potencia el gasto productivo.

Además, contrapuso la política fiscal "prudente" y "equitativa" del ministro Solbes con el "¡viva Cartagena! en que está instalado el Gobierno Aguirre".

El representante de IU, Miguel Reneses, afirmó que el presupuesto de 2008 perpetúa el "déficit social" de Madrid y que con él "ganan" las rentas de capital y las altas rentas salariales y "pierden" la mayoría de los trabajadores.

Reneses, que dijo estar "harto" de que el PP hable en la Asamblea de Madrid de Rodríguez Zapatero, de Cataluña y de Parla, pidió la retirada del presupuesto tras hacer hincapié en que se basa en "transferir renta salarial al sector privado" y en que el esfuerzo inversor "desaparece".

Abogó por un cambio de modelo económico que apueste por el empleo estable y criticó las rebajas de impuestos, en especial la anunciada eliminación del Impuesto de Patrimonio.

La consejera de Hacienda, Engracia Hidalgo, defendió que los presupuestos de 2008 servirán para generar crecimiento económico y empleo, para incrementar la productividad y la competitividad, y para mejorar los servicios públicos, en especial la Sanidad.

Destacó que Sanidad (6.954 millones de euros) y Educación (4.781 millones) representan el 62 por ciento del presupuesto y que la construcción de nuevas carreteras (4.200 millones) será la actuación "estrella" en materia de infraestructuras.

Recordó que el primer presupuesto de esta legislatura asciende a 18.985 millones de euros, un 4,49 por ciento más que el del año anterior, y que si se suman los créditos de los entes públicos y las sociedades mercantiles asciende a 21.236, "lo que supone que la Comunidad destinará 58 millones de euros diarios a la prestación de servicios públicos a madrileños", dijo.

El portavoz del PP, Antonio Beteta, consideró que los Presupuestos de la Comunidad son "prudentes" y "adecuados a la coyuntura, porque corren negros nubarrones".

Tras defender la "legitimidad absoluta" del PP para presentar unos presupuestos fundamentados en su programa electoral, Beteta acusó al PSOE de "no reconocer la realidad" y arremetió contra el "dontancredismo" de Solbes y el "modelo parleño" de los socialistas madrileños.

Los Presupuestos de la Comunidad de Madrid para 2008, a los que se han presentado 2.104 enmiendas parciales (1.573 del PSOE, 526 de IU y cinco del PP) se aprobarán definitivamente en la Asamblea el próximo 20 de diciembre.