La Feria de Sevilla, expedientada y 'ahorradora'

La Calle del Infierno de la Feria de Sevilla está al rojo vivo: sus 116 atracciones son el objeto de investigación de la recién nacida Agencia de Defensa de la Competencia de Andalucía, que ve indicios de una posible concertación de precios.

Todos los 'cacharritos' tienen la misma tarifa: tres euros por viaje, que se transforman en cinco euros en las horas punta. El Ayuntamiento se lava las manos y los dueños de las atracciones no ocultan que la supuesta concertación de precios se lleva a cabo para "no incurrir en competencias" y así poder amortizar el canon municipal de ocupación de la vía pública, que, en el caso de la noria, asciende a 18.000 euros.


La Feria ahorra...

A los dueños de las atracciones les puede salir cara la feria, pero con la factura de la luz sucederá todo lo contrario: las 367.000 bombillas del Real son de bajo consumo, lo que permitirá un ahorro del 13%. Además, las luces se apagarán una hora antes de lo habitual. En cualquier caso, el consumo energético de la feria es equivalente al de una ciudad de 40.000 habitantes.

Solo la portada -de 45 metros de altura, 50 de ancho y un peso de 180 toneladas- está compuesta por 25.000 bombillas y su realización ha costado 470.000 euros.


... pero los sevillanos no

Aunque la feria de este año sea más 'ahorradora' y más respetuosa con el medio ambiente -además de restringir el gasto energético, se ha dispuesto un sistema de reciclaje del aceite usado para freír-, los sevillanos siguen derrochando como siempre.

Poner en pie una caseta y surtirla de comida y bebida, solo para la noche del 'pescaíto' cuesta unos 30.000 euros; cantidad que, multiplicada por las más de mil casetas dispuestas en los 450.000 metros cuadrados del Real, supera los 31 millones de euros solo en esta partida.

Los socios de la caseta suelen aportar unos 1.500 euros; algunos han tenido que esperar más de diez años para contar con esta pequeña 'casa de feria' durante los siete días de fiesta y no escatiman en gastos. Esto explica que muchos sevillanos recurran a los créditos personales para vivir la feria a todo tren: la cuantía de estos préstamos ronda los 4.000 euros pero puede llegar a superar los 10.000 euros.

La feria, motor económico

Concebida como feria de ganado y transformada en cita de glamour y diversión, la Feria de Abril de Sevilla es todo un motor económico.

El sector más beneficiado es el de la hostelería: aunque este año no se ha colgado el cartel de "No hay billetes" en los hoteles, se comerá y se beberá como siempre: se prevé que en la feria se degusten 10.000 jamones, 15.000 kilos de pescado, 40.000 kilos de marisco y 7.000 kilos de gambas, que se regarán con 700.000 litros de cerveza y 400.000 litros de manzanilla.

Una buena feria necesita de mucho volante, pero la moda flamenca ha traspasado lonas y albero y se está consolidando como uno de los sectores más importantes de la economía andaluza. La partida destinada al vestuario ocupa también uno de los primeros lugares en cuantía: un traje de flamenca puede costar entre 200 y 3.000 euros.

Y como no solo los sevillanos disfrutan de la feria, Renfe ha dispuesto estos días un servicio reforzado de AVE entre Madrid y la capital hispalense, con casi 20.000 plazas adicionales, lo que supone un incremento del 17,2% respecto al servicio habitual.