El Cine Doré, sede de la Filmoteca Nacional, acogió un acto homenaje, presidido por
Zapatero, y en el que estuvieron presentes la esposa del presidente,
Sonsoles Espinosa; el ministro de Cultura,
César Antonio Molina; la ministra de Educación, Política Social y Deporte,
Mercedes Cabrera; así como el director general del ICAA,
Fernando Lara; o la presidenta de la Academia de Cine,
Angeles González-Sinde. "
Gracias por estar entre nosotros y gracias por este homenaje a la figura de Fernando Fernán-Gómez", agradeció su viuda.
A la cita, en la que se proyectó un audiovisual con diversos extractos de entrevistas y declaraciones de
Fernán-Gómez y fragmentos de sus principales películas (realizado por
José Luis López-Linares y
Arantxa Aguirre) también asistieron su hija
Helena y compañeros de profesión como
Alvaro de Luna, Neus Asensi, Berta Ojeda, Fernando Trueba, Pilar Bardem, María Asquerino, Marisa Peredes, Charo López, Sancho Gracia, Miriam Díaz Aroca, Tina Sáinz o J
osé Manuel Cervino, entre otros muchos.
Jackie Cooper y Emilio Salgari
Zapatero, tras entregar a
Cohen la condecoración ante los aplausos del público levantado de sus butacas, señaló en su discurso que Fernán-Gómez (que de niño frecuentaba el Cine Luchana acompañado de sus abuela y que como él mismo recordaba, soñaba con ser "
dos cosas: el niño Jackie Cooper y Emilio Salgari") fue "
el patriarca de los cómicos". "
Además de sentirse cómico de la lengua, se convirtió en un intelectual respetado en todos los ámbitos", afirmó el presidente, destacando que los cómicos "
siempre han sido la punta de lanza de nuestra sociedad".
Después de la labor que, consideró, llevan a cabo los creadores en España, Zapatero afirmó que "
nadie puede utilizar la palabra cómico con un tono ligero". Recordar a Fernán-Gómez, prosiguió, es recordar también "
a una generación que tuvo que sufrir una de las etapas más tristes de nuestra historia, viviendo como niños la guerra civil y después 40 años de dictadura", subrayó, recordando que los cómicos arriesgan en el ejercicio de la libertad, como hizo Fernán-Gómez en su discurso de ingreso en la RAE o
Javier Bardem al recoger su Oscar.
Fue entonces cuando quiso reivindicar a los cómicos pero también a la libertad y a una generación, la de Fernán-Gómez (que nunca perdió la ilusión por la juventud, como el propio actor narraba en el vídeo proyectado hoy),
Berlanga, Juan Antonio Bardem, Azcona, Borau y
Aleixandre, "
por méritos propios, como una de las más brillantes de nuestro siglo XX, tan dramático en acontecimientos históricos como rico en aportaciones a nuestra cultura y a la cultura universal".
Una época en blanco y negro
Zapatero se preguntó, además, cómo podríamos imaginar cómo fue la guerra civil sin esta generación de artistas "
que tenían que luchar diariamente con la censura". "
Ellos sembraron la memoria de esa época amarga y en blanco y negro. Simbolizan la continuidad y la ruptura", apuntó el presidente, que momentos antes había definido al homenajeado como
"tímido por convicción" y "
excepcional intérprete", que vivió su vida "
desde la libertad y el compromiso".
Durante el acto, en el que ejercieron de presentadores
Verónica Forqué y
Miguel Rellán, Díaz Aroca, Sáinz, Cervino y
Gracia leyeron textos de Fernán-Gómez, pertenecientes a la biografía del cómico. El público asistente tuvo además la oportunidad de ver en primicia la proyección de un vídeo en el que el propio Fernán-Gómez recitaba un poema de León Felipe. En el escenario del Doré, en el que sonó la melodía del tango 'Caminito', de Morente, estaba colocada una fotografía del actor y dramaturgo.
Premios
La Academia de Cine, en colaboración con el Ministerio de Cultura y la Filmoteca Española, rindió de esta forma homenaje a uno de los actores, directores y guionistas más importantes de nuestra cinematografía, fallecido en el mes de noviembre de 2007 en Madrid.
La Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio se une al resto de reconocimientos y premios que el actor recibió durante su carrera. Además de ganar seis premios Goya tiene en su haber la Medalla de Oro de la Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, la Medalla de Oro de las Bellas Artes y del Mérito en el Trabajo, los Premios Nacionales de Teatro y de Cinematografía y el Príncipe de Asturias de las Artes.
El Festival de Cine de San Sebastián le otorgó el Premio Donostia en reconocimiento a toda su trayectoria y fuera de nuestras fronteras su labor cinematográfica fue reconocida con dos Osos de Plata del Festival de Berlín en la categoría de mejor actor y la Copa Volpi del Festival de Venecia también como mejor actor.