Países del Pacífico americano inician reunión

Desde el congreso de 1826 en Panamá los latinoamericanos han soñado con la integración. El pacto A,B,C, entre Argentina, Brasil y Chile, que terminó por la guerra del Chaco; el CAN (Comunidad Andina de Naciones) conformada por Perú, Ecuador, Colombia y Venezuela; o el proyecto de homologación de integración aduanera que dio nacimiento a Mercosur; o la Comunidad Sudamericana de Naciones.  Méjico es el país más alejado, que tradicionalmente ha preferido negociar con su cercano vecino, los Estados Unidos, pero que ahora mira con atención el potencial al sur de sus fronteras.

El mapa del Pacífico latinoamericano es cada vez más homogéneo y democrático. En esta región, y nuevamente en Panamá, es donde se celebra la reunión que pretende institucionalizar la integración, principalmente para la vinculación con Asia.  La consolidación de un bloque con ventajas comparativas, trabajando las economías de escala, mejorando la convergencia comercial y atendiendo las reglas de origen común, hará a los países de la cuenca del Pacífico más competitivos.

Esta reunión la lidera el Grupo de Reflexión, que tendrá a su cargo la elaboración de un documento que servirá de guía para la IV Reunión del Foro, a celebrarse en Chile el próximo mes de octubre.   El grupo fue creado para evaluar los medios más apropiados para la institucionalización, la eventual creación de mecanismos de seguimiento, intercambiar experiencias en materia de fortalecimiento institucional, en particular en lo que respecta a la identificación de prioridades en políticas públicas y fomento de la transparencia y el buen Gobierno.

La iniciativa de ARCO está integrada por Colombia, Costa Rica, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Perú y Panamá, así como por entidades financieras internacionales como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Centroamericano de Integración Económica y la Corporación Andina de Fomento (CAF).