El líder del PP y candidato a la Presidencia del Gobierno,
Mariano Rajoy, se mostró convencido de que su partido va a ganar las próximas elecciones generales porque muchos españoles que no le dieron la "confianza" en 2004, ahora "se han dado cuenta de que España necesita que el Partido Popular vuelva al Gobierno". "Sinceramente le conviene a España que el PP gane las próximas elecciones".
Así lo aseguró ante más de 25.000 personas que abarrotaban la Plaza de Toros de Valencia y las inmediaciones, en un festivo mitin que concluyó con fuegos artificiales y la interpretación del himno valenciano por parte del cantante Francisco. Rajoy innovó esta noche y subió al escenario con micrófono en mano. Allí se rodeó de un grupo de chicas --que portaban camisetas con el lema 'Quiero ser tu niña'-- y que gritaron "Victoria".
En el mitin más multitudinario de la campaña electoral, el líder del PP tuvo como teloneros a la alcaldesa de Valencia,
Rita Barbera, el presidente provincial,
Alfonso Rus, el cabeza de lista al Congreso,
Esteban González Pons, y el presidente de la Generalitat,
Francisco Camps. Todos ellos hablaron de la niña de Rajoy, que, según proclamaron, se llamará
Victoria.
El presidente de los 'populares' abrió su alocución dando las gracias al presidente de la Generalitat que, según dijo, le ha "ayudado mucho". "Sabes que no lo he pasado bien", afirmó. Pero añadió que ahora está "más curtido que nunca, más baqueteado", tiene "más experiencia política, más madurez" y está "en el mejor momento". Y afirmó: "sinceramente le conviene a España que el PP gane las próximas elecciones".
Según Rajoy, los españoles han visto "cómo se ha intentado excluir a una parte de España de las grandes decisiones", pero también cómo el PP ha sabido "aguantar" y "resistir", defendiendo sus "principios y convicciones". Entre tanto, agregó, el Gobierno socialista se ha dedicado, dijo, a "generar líos, problemas y divisiones".
Por eso, se mostró convencido de que el Partido Popular ganará los comicios porque el día 9 de marzo "le van a votar los que le votaron en 2004" y además "muchos españoles que entonces" no confiaron en el PP pero que "ahora se han dado cuenta de que España necesita que el PP vuelva al Gobierno".
"Voy a ser presidente pero lo importante es que haya una cambio en España y haya un gobierno como dios manda", aseguró, para añadir que el PP está pidiendo el voto "a todos los españoles" porque es "necesario para España". Su auditorio le pidió entonces que botara y el líder del PP no quiso defraudar y saltó sobre el escenario.
Rajoy, que estaba eufórico, recordó que hace nueve meses "
nadie daba un euro" por el PP pero ahora, proclamó, el partido va a ganar las elecciones. "Vamos a ganar el sprint, como ganan los motociclistas o como ganan los ciclistas, que me están preparando para que yo haga el rush final en el último segundo del último minuto", enfatizó.
A continuación, arremetió contra Zapatero y aseguró que, mientras que "
otros" cuentan con el "
apoyo de los poderosos o de los que se consideran más importantes", él tiene a las personas. "
Pero en la vida", prosiguió, "
una persona es capaz de mover el mundo y la humanidad se ha hecho a base de personas que han tenido coraje". "
Os prometo que estaré a la altura de las circunstancias y gobernaré con cabeza", afirmó, ante un público encendido.
A su juicio, "
un gobernante no puede estar en la luna, tiene que estar en la tierra", "mojarse y recibir críticas y aguantar". "No ha sido capaz de hacerlo y ha tenido el apoyo de la mayoría, ha tenido el apoyo de la mayoría de los que escriben, pero nosotros tenemos a las personas", señaló.
El candidato 'popular' aprovechó este multitudinario mitin en Valencia para prometer AVE a esta comunidad y agua. Según dijo, el PSOE "no ha hecho nada" pero el PP no se va a "quedar parado". "No me voy a quedar parado porque no quiero que me elijan para estar en una butaca sino para gobernar para todos", indicó.
Zapatero: "España pertenece a todos"
El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a la reelección,
José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó hoy que "
nadie tiene la propiedad intelectual de la idea de España", sino que "
España pertenece a todos" y todos los españoles tienen derecho a decir cómo quieren "
vivir y sentir España".
"
Nadie tiene la propiedad intelectual de la idea de España, nadie la tiene. España está aquí, y en Bilbao, y en Valencia y en Canarias. España pertenece a todos y todos tenemos derecho a decir como queremos vivir y sentir España, no a que nadie nos lo imponga", manifestó en un multitudinario mitin en el Palau Sant Jordi de Barcelona.
"
Todos tenemos la propiedad de España, de la idea de España y todos lo hemos puesto por escrito, cada uno aportando una parte del conjunto. Está en la Constitución, es el autogobierno, es la diversidad, es el respeto a las identidades y el respeto a las lenguas, es la convivencia esa es nuestra idea de España", añadió.
En un mitin junto al ex presidente del Gobierno
Felipe González, la cabeza de lista del PSC al Congreso por Barcelona,
Carmen Chacón; el presidente de la Generalitat,
José Montilla; y el alcalde de la ciudad,
Jordi Hereu. Chacón cifró la asistencia en más de 40.000 personas.
Zapatero pidió el voto a los catalanes e hizo hincapié en que "
España no se defiende atacando a Cataluña, al País Vasco, a Andalucía", sino que "
se defiende trabajando por la convivencia y llamando a todos los ciudadanos a compartir un proyecto común integrando todas las banderas, todas las lenguas, que es como somos más fuertes en España y en el mundo".
La entrevista de Zapatero en TVE
En una entrevista de poco más de 15 minutos grabada en TVE, Zapatero recordó que le preguntó a Rajoy qué política antiterrorista prefería, si la del último Gobierno del PP, cuando hubo 238 víctimas de ETA, o la de la última legislatura, con cuatro. "Rajoy no contestó porque es un dato muy objetivo para poner de manifiesto la injusticia", enfatizó Zapatero en referencia a la oposición de los 'populares' en este sentido.
El líder socialista aseguró que en el segundo debate que mantuvo con el candidato del PP, Mariano Rajoy, no quiso "
comparar" las víctimas mortales de ETA en las dos últimas legislaturas, sino "poner de manifiesto" que había sido "
muy injusta toda la oposición crispante contra la política antiterrorista" de su Gobierno.
Asimismo, el candidato socialista subrayó que cuando él era jefe de la oposición no hizo ninguna pregunta al ex presidente José María Aznar sobre terrorismo y que, sin embargo, Rajoy le ha interrogado sobre este tema en 20 ocasiones. "Yo hice una proclamación --recordó el presidente--, y es que fuera cual fuera el resultado electoral, el PSOE se comprometía a apoyar sin condiciones al próximo Gobierno".
Según Zapatero, su Gobierno intentó "comprobar" si "la aparente intención de ETA" de abandonar las armas era "cierta o no". "Comprobado que eran otras cosas, el Gobierno dijo que no y ETA rompió el alto el fuego". Zapatero calificó como "un poco absurdo" que se diga que se "negoció políticamente" ya que, dijo, la tregua se rompió porque dijimos "aquí sólo se habla de fin de la violencia y de paz". Por esta razón, en opinión del jefe del Ejecutivo, "se ha jugado con mala fe" sobre este asunto.
Zapatero se mostró convencido de que el partido que gane en votos el próximo 9 de marzo también logrará más escaños ya que, dijo, lo contrario "no se va a dar" y "no se ha dado nunca" en la historia de la democracia española. El presidente recordó que, "a tenor de todos los sondeos", el PSOE "va por delante", por lo que pidió ganar con "una mayoría suficiente" para que pueda ejecutar su programa electoral "sin complicaciones".
Al ser preguntado por la primera medida que tomará si es reelegido presidente del Gobierno, Zapatero reiteró que llamará a los sindicatos y empresarios para hacer "
un acuerdo de concertación social" con el objetivo de presentar "medidas inmediatas" encaminadas a atender al "colectivo de personas que están perdiendo el empleo en el sector de la construcción".
Zapatero encuadró esta medida como consecuencia de la "desaceleración económica" y, además, ironizó: "No estamos en Irak, no hay tropas que retirar".
Zapatero, tras las repetidas polémicas con la CEE, aseguró que buscará unas relaciones "
correctas" con la Conferencia Episcopal Española, aunque reclamó que se respete el "principio elemental" que representa la "superioridad de la legislación que emana del Parlamento". Además, subrayó que, tras la proclamación del cardenal Antonio
María Rouco Varela como presidente de la CEE, espera que las relaciones sean "correctas" y que "cada uno ocupe el espacio que le corresponde".
Zapatero abogó por que "
la extensión de los derechos individuales" no se opongan con las "creencias religiosas". "En una democracia nadie puede imponer sus creencias religiosas ni su moral, todas son respetables", enfatizó.
"Sería deseable que el diálogo público -- continuó Zapatero en referencia a las últimas manifestaciones de los obispos--
se mantuviera en el límite del natural respeto entre quien representa a un Gobierno y a un Estado, como es el Gobierno de España, y el que representa a otro Estado como el Vaticano".
Si (
No(
