Trabajar... más

Rectificar es de sabios y el Gobierno lo está haciendo a marchas forzadas. Ahora estamos a vueltas con el tema de las pensiones y se pronostica alargar la vida laboral hasta los 67 años, lo cual va a ser necesario si no queremos que nuestro sistema, hasta ahora envidiado por muchos, corra un grave peligro. La medida está  plenamente justificada aunque como siempre se haya hecho de forma improvisada y sin contar con nadie, lo que ha supuesto que los sindicatos pongan el grito en el cielo y el PP también.

   Todos los pronósticos apuntan a que en el 2049 en nuestro país la población menor de 16 años y la mayor de 64 será equivalente a la que está en edad de trabajar. Si a lo largo de estos años  nacen menos niños y hay mas personas mayores que jóvenes, la población empezará a decrecer y se piensa- según un estudio realizado por el Instituto Nacional de Estadística- que por cada diez personas que trabajen nueve estarán inactivas, o lo que es lo mismo que cada español tendrá otro que trabaja por él. Algunos pueden pensar que 40 años son muchos, pero en realidad es un periodo corto si se trata prevenir antes que curar.

Con esa perspectiva y con los malos augurios nacionales e internacionales sobre nuestra situación económica, el gobierno acierta cuando fija su objetivo en garantizar las pensiones del futuro aunque eso signifique que todos los trabajadores tengamos que hacer un esfuerzo mayor. Personalmente soy una de las afectadas por la medida y aunque a nadie le guste pensar en que ¡con todo lo que llevamos currando y ganándonos el pan con el sudor de la frente¡tendremos que alargar aún más nuestra vida laboral, considero justo que así sea.

   Todos tendremos que arrimar el hombro un poco más, menos algunos  que gracias a los bochornosos planes de prejubilaciones que se han producido con este gobierno se jubilaron a los 50 años y con su salario integro, como ha sido el caso de RTVE. Cuando esto se produjo muchos alzamos la voz advirtiendo que se consideraba no aptos para trabajar a periodistas en la plenitud de su carrera profesional y que tal vez la medida obedecía más que al saneamiento de la empresa- de hecho ya se han contratado en el ente público un número similar de personas que las que se prejubiló- a oscuras intenciones políticas como así ha sido.

   También en esto el gobierno ha rectificado ¡a buenas horas mangas verdes dirán algunos de mis compañeros de profesión afectados por los famosos ERES ¡pero hay que reconocer que más vale tarde que nunca. Con el paquete de medidas aprobado ayer, España hace lo mismo que ya ha hecho Holanda o Alemania para evitar que el sistema de pensiones entre en quiebra y por lo tanto no puede considerarse algo que está fuera de lugar dados los tiempos que corren. Lo criticable no es que se haya dado el paso sino la forma opaca en que se ha dado y el empeño del gobierno de Zapatero de improvisar sobre la marcha. Claro que con más de cuatro millones de parados, un déficits desbocado y una deuda que pone los pelos de punta o se espabila o las urnas serán implacables con su gestión.