Los obispos instan a los católicos a ser coherentes con sus convicciones cristianas en las elecciones

En su discurso de apertura de la Asamblea Plenaria de Obispos, que se celebra en Lourdes desde ayer y hasta el próximo viernes, el prelado detalló que entre estas convicciones se encuentra el valor de la familia, que, según opinó, "en la actualidad tiene más necesidad que nunca de ser sostenida".

"Decimos si a la familia fundada en el matrimonio de un hombre y una mujer, abierta a la procreación y al derecho que tiene el niño de tener un padre y una madre", afirmó el cardenal, quien, además, se mostró contrario a la despenalización de la eutanasia. Al respecto, señaló que "la dignidad de la vida ha de ser reforzada en todo momento" y que, por ello, "no se puede admitir de ninguna manera esta práctica".

Con respecto al aborto, el presidente del Episcopado francés aseguró que "en este campo se ha pasado de una lógica de confrontación a la afirmación de un derecho que parece evidente y al que cada vez resulta más difícil resistir ante las fuertes presiones".

Monseñor Ricard también insistió en la importancia de un mayor reparto del trabajo y las riquezas para luchar contra las desigualdades crecientes en el mundo y en ese país. "Europa no puede ni debe desinteresarse del resto del mundo; más bien debe tener plena conciencia de que otros países y otros continentes esperan de ella iniciativas audaces para ofrecer a los pueblos más pobres, los medios para su desarrollo y organización social y para edificar un mundo más justo y fraterno", señaló.

Por último, también alertó sobre los peligros en la investigación biomédica cuando no se respetan los derechos del hombre y pidió una "acogida generosa, responsable y respetuosa de los emigrantes".