Miles de personas se concentran en varias ciudades contra la prisión atenuada a De Juana

El presidente del Foro de Ermua, Mikel Buesa, leyó un manifiesto en el que denunció que "el Gobierno cede ante lo que ETA exige sin importarle la ley, las víctimas y la ética política". Asimismo, llamó a todos los españoles a que prosigan con "la rebelión contra el Gobierno de Zapatero" para, finalmente, dirigirse a los "compañeros socialistas" para recordarles que, "con su silencio", son "cómplices" del Ejecutivo socialista y de los terroristas.

Entre gritos de 'De Juana a prisión, Zapatero dimisión' y 'Viva España', los asistentes, que inundaron el centro de la ciudad de banderas españolas, permanecieron ante la Plaza del Consistorio hasta las 21 horas de la noche. También se pudieron ver varias pancartas de grandes dimensiones en las que las palabras 'Zapatero' y 'ETA' aparecían unidas con un corazón y otra en la que se leía 'Con Zapatero es gratis matar'.

A la concentración asistieron el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; el vicealcalde, Manuel Cobo; la segunda teniente de alcalde y concejala de Empleo y Servicios a la Ciudadanía, Ana Botella; y la concejala de Urbanismo, Pilar Martínez, entre otros miembros del equipo municipal popular.

Por otra parte, el sociólogo Armando de Miguel subrayó, en un manifiesto leído como portavoz de DENAES, que "el Gobierno español ha rebajado la democracia hasta un nivel de indignidad insoportable", tras lo que apuntó que "los españoles demócratas no pueden tolerar la victoria de unos asesinos".

La concentración finalizó con el himno nacional. Previamente, la organización de la manifestación había pedido a los asistentes "tranquilidad" tras recordar que los símbolos y consignas preconstitucionales "no tenían nada que ver" con el objetivo de la protesta.

En Sevilla, unas 2.500 personas, según los cálculos de la Policía Local, se han concentrado hoy pacíficamente a las puertas del Ayuntamiento secundando el llamamiento del Foro de Ermua, que ha convocado a la ciudadanía a las puertas de los ayuntamientos de las capitales de provincia como muestra de rechazo a la prisión atenuada concedida al preso de la banda armada Iñaki de Juana Chaos, que ha superado una huelga de hambre durante 114 días para conseguir tal extremo.

Miles de personas se concentraron también ante las puertas de los Ayuntamientos de Valencia, Alicante y Castellón, con la presencia de los alcaldes de las tres ciudades y de otras autoridades autonómicas, para protestar por la excarcelación del etarra José Ignacio de Juana Chaos, actos que se desarrollaron sin incidentes.

En Valencia, alrededor de 2.500 personas, según la Policía Local, entre ellas la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, se concentraron en la plaza del Ayuntamiento para protestar contra la decisión del Gobierno de excarcelar a De Juana Chaos y exigir la dimisión del presidente del Gobierno y del ministro de Interior.

En Alicante, el presidente de Les Corts, Julio de España, del PP de Alicante, José Joaquín Ripoll, y el alcalde de la capital Luis Díaz Alperi, participaron en la concentración que congregó a cerca de un millar de personas frente al consistorio alicantino. Frente al Ayuntamiento de Castellón también se concentró un millar de personas, entre ellas el vicepresidente del Gobierno valenciano, Victor Campos, el presidente de la Diputación, Carlos Fabra, y el alcalde de la ciudad, Alberto Fabra.