www.diariocritico.com

¿Mundial mirabilis para España?

miércoles 09 de junio de 2010, 14:26h

La mayor ocasión que vieron los siglos. Parafraseando a Cervantes cuando se refería a la batalla de Lepanto, bien podemos decir/escribir que el fútbol español presenta sus credenciales por primera vez en la historia de un Mundial como favorito. De ahí lo de la ocasión, porque hasta ahora siempre estábamos entre los aspirantes, al inicio, y entre los fracasados o casi, al término de esta otra batalla o guerra deportiva que es el campeonato planetario. Y somos favoritos por merecimientos propios, porque nuestros números son de récord desde el despertar definitivo que supuso el título Europeo de hace dos años en Viena, entonces con nuestros jugones, con nuestros locos bajitos, con nuestro centrocampistas magos del balón, con nuestro toque y toque y toque. Los mismos que ahora –con el moderadísimo y extraordinario jefe en el banquillo Vicente del Bosque en lugar del excéntrico pero no menos excepcional Luis Aragonés- conformarán los medios centros mejores del mundo, la mejor cocina de elaboración del deporte rey: Xavi, Iniesta, Silva, Cesc, Xabi Alonso y Busquets.

Casualmente o no, esta generación de inigualables jugadores coincide con el mejor momento que vieron los siglos de nuestro deporte, muy por encima de nuestra situación general entre las naciones punteras. De aquellos ‘annus horribilis’ que tanto nos caracterizaron casi desde siempre, hemos saltado en tan sólo un par de décadas a los ‘annus mirabilis’ desde el inicio de esta centuria que se van sucediendo por fortuna sin solución de continuidad. Si un año es bueno y parece que hemos tocado techo, el otro es mejor y tocamos el cielo de la gloria universal con nuestros deportistas. Y no es menester insistir mucho ni citar a todos, porque entonces esta opinión se haría interminable y se extendería per los siglos de los siglos. 

Ahí es nada: Rafael Nadal -tan reciente su quinto entorchado parisino de Roland Garros-, Pau Gasol, Fernando Alonso, Alberto Contador, Alejandro Valverde -pese a la injustísima y envidiosa persecución italiana que no ha cejado hasta su sanción por hechos supuestamente de hace más de un lustro y sin comprobar jurídicamente- Jorge Lorenzo, Dani Pedrosa, Álvaro Bautista… Ahí es nada a nivel de selecciones nacionales o equipos: la ya mencionada Eurocopa futbolera, los entorchados europeos y mundiales de los ‘chicos de oro’ baloncestísticos; idem de los ‘balonmaneros’ y ‘futbolsaleros’, ídem de ese máximo campeonato tenístico de conjuntos que es la Copa Davis -con tres ya en nuestras vitrinas y las que la ‘armada’ promete en próximos años, los también baloncestísticos del Barça -hace unos días campeón de la Euroliga- y de la sección de balonmano de los azulgrana, sin olvidar los europeos y mundiales del Ciudad Real. Y, claro, volviendo al fútbol, además del campeonato europeo de ‘La Roja’, el del Barça de los seis títulos consecutivos en ‘Champions’ y redondeado después con el Mundial de clubes, y el estreno de la antigua Copa de la UEFA -hoy pomposamente llamada Liga Europa- por parte del Atlético de Madrid,

En definitiva, como habrá tiempo para ir analizando antes y después de cada partido de España, sólo insistir en que es la gran oportunidad para el único título mundial que se resiste a nuestro deporte, posiblemente el más mediático: el futbolero, cuya conquista redondearía esa definición de ‘mirabilis’. Pero tampoco podemos olvidar que no siempre gana el máximo favorito, y no es ir poniendo excusas, ya que si el campeonato se desarrolla con cierta normalidad, ‘La Roja’ estará luchando hasta el final -y en la final- por ello. Pero no podemos olvidar que hay pequeños detalles, a veces decisivos, que escapan a la planificación y a la calidad. Desde lesiones inoportunas a arbitrajes perjudiciales -¿recuerdan el del Gamal Ghandour que nos echó en cuartos del Mundial de Corea?-, a la mala suerte que hace que por un milímetro o por un rebote el balón entre o no entre, que la felicidad o la tragedia lleguen sin poder evitarlo ni influir. Los juguetones diocesillas del azar son así hay que contar con ellos.

En cualquier caso, sin olvidar tampoco que los resultados se miden por eso, por los resultados y títulos y no valen victorias morales, casi tan importante como ellos es la imagen que ofrezca ‘La Roja’ para que sigamos enganchados a la misma, para que siga siendo -y los españoles con ella- un orgullo, un banderín de enganche al que apuntarse. Ojalá también nos acompañe la suerte del campeón para este Mundial mirabilis. Amén.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios