En un reciente encuentro, el consejero de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, Juan Alfonso Ruiz Molina, tomó la palabra para abordar un tema crucial que afecta a la comunidad: la necesidad de un sistema tributario que sea verdaderamente justo. Su discurso se centró en la importancia de establecer principios de igualdad y progresividad en el ámbito fiscal, rechazando cualquier propuesta que amenace estos fundamentos constitucionales.
Ruiz Molina no dudó en expresar su preocupación por las iniciativas que podrían socavar los valores esenciales de justicia fiscal. En su intervención, hizo hincapié en que es imprescindible contar con una ley estatal que asegure la armonización fiscal. Esta legislación debería prevenir la competencia desleal entre las distintas regiones del país y ser coherente con el principio de autonomía financiera y corresponsabilidad fiscal.
La lucha por la equidad fiscal
El consejero destacó que un sistema tributario equitativo es fundamental para garantizar el bienestar de todos los ciudadanos. Al abogar por esta causa, subrayó cómo las diferencias en la política fiscal pueden generar desigualdades significativas entre comunidades autónomas, lo cual es inaceptable.
A través de sus palabras, Ruiz Molina reafirmó su compromiso con una financiación autonómica que no solo respete los derechos de cada región, sino que también promueva un entorno donde todos tengan las mismas oportunidades. La igualdad en el sistema de financiación es, según él, una cuestión de justicia social que debe ser prioritaria en la agenda política.