Canales demostró ser un jugador descarado, que no distingue de escenarios ni rivales. El espigado centrocampista rubio --que finaliza contrato este próximo mes de junio-- fue el auténtico protagonista en el triunfo montañés ante el Sevilla. El canterano racinguista firmó el primer tanto de los suyos con una preciosa vaselina y el segundo tras una jugada magistral, que dejó sentado a varios jugadores hispalenses.
Ambos goles llegaron a partir del minuto 25 y en apenas un 'santiamén', tiempo suficiente para noquear a los pupilos de Manolo Jiménez, que no terminan de dar con la tecla. El Sevilla lo intentó de todas las maneras, pero su afición se echó en contra y tuvo que remar demasiado contracorriente. Romaric, a la hora de partido, recortó distancias, pero no pudo evitar el desastre que podría dejar fuera de Europa al Sevilla si hoy ganan Getafe y Deportivo.