Agentes de Policía Nacional han detenido a cinco miembros de un grupo organizado de origen búlgaro dedicado a clonar tarjetas bancarias mediante la instalación de dispositivos de copiado en cajeros automáticos de entidades financieras situadas en Bilbao, Palencia, Málaga y Madrid.
Según informó la Policía, la red instaló su base de operaciones en la capital aunque también actuó en Bilbao, Palencia y Málaga, donde colocó estos dispositivos para obtener los datos de los usuarios. En los registros domiciliarios, los agentes intervinieron una veintena de equipos listos para instalar, más de mil tarjetas falsificadas y abundante material informático.
El 'modus operandi' del grupo consistía en instalar en los cajeros automáticos dispositivos formados por una 'boca' lectora y un teclado falso para conseguir la información de las bandas magnéticas de las tarjetas así como los números secretos de los usuarios de los cajeros.
CÉLULAS EN MILÁN O NAIROBI
Con la información en su poder, realizaba copias exactas de las tarjetas y seguidamente efectuaban sucesivas extracciones de dinero en cajeros bancarios distribuidos por la Comunidad de Madrid. En otras ocasiones, los ahora detenidos enviaban la información a células establecidas en ciudades como Milán o Nairobi (Kenia), donde otros miembros de la organización realizaban las disposiciones en efectivo.
Los investigadores constataron que algunos de los delincuentes llevaban operando en España desde finales del año 2008 y les considera presuntos responsables de la colocación de más de una treintena de dispositivos para el copiado de tarjetas instalados en Bilbao, Palencia, Málaga y Madrid.
Al parecer, el hecho de que algunos miembros carecían de antecedentes policiales en España obstaculizó en un principio la identificación de los ahora detenidos. Tras una laboriosa investigación y costosas gestiones documentales, los agentes lograron averiguar la identidad de los cinco búlgaros arrestados para después proceder a su detención. En el momento de la detención portaban documentación falsa.
En el curso del operativo, los agentes efectuaron tres registros domiciliarios, uno de ellos en la vivienda de seguridad de los miembros del grupo en la que intervinieron veinte dispositivos para la obtención de la información de las tarjetas de cajeros automáticos, más de mil tarjetas falsificadas y abundante material informático.
400 DENUNCIAS ESCLARECIDAS
Hasta ahora, la Policía ha esclarecido más de 400 denuncias de afectados en Madrid por la instalación de estos dispositivos aunque estima que el fraude podría ascender a cientos de miles de euros.
La operación ha sido realizada por el Grupo XX de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid en colaboración con agentes del Grupo IV de la UDEV Central, de la Comisaría General de Policía Judicial.
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