"La lógica del Pacto es que España y otros países deben seguir políticas presupuestarias sólidas, precisamente para evitar problemas en el futuro", ha manifestado el comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Pierre Moscovici.
Bruselas fija una serie de recomendaciones a nuestro país, que si consigue el visto bueno de los ministros de Economía y Finanzas de la UE, pasará del 'brazo corrector al preventivo'.
Según las previsiones de la Comisión, "existe un riesgo de desviación significativa de la trayectoria de ajuste recomendada hacia el objetivo presupuestario a medio plazo en 2019; además, si no se producen cambios en las políticas, existe un riesgo de desviación significativa con respecto al ajuste presupuestario requerido".
La Comisión da por hecho que España no cumplirá los requisitos de la norma transitoria en materia de deuda ni en 2019 ni en 2020. "El Consejo considera que deben adoptarse las medidas necesarias para cumplir las disposiciones del Pacto de Estabilidad y Crecimiento", por lo que insta a utilizar "los ingresos extraordinarios para continuar reduciendo la ratio de deuda de las Administraciones Públicas".
Aunque Bruselas reconoce el descenso del desempleo, señala que la tasa sigue muy por encima del promedio de la UE, "especialmente en lo que concierne a la gente joven y a las personas con baja cualificación".
La Comisión recomienda a España a favorecer la contratación indefinida ante el "uso aún generalizado de contratos temporales, que figura entre los más altos de Europa y podría suponer un obstáculo para la capacidad de crecimiento de España y su cohesión social".
Bruselas también solicita "medidas para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones", aumentar las inversiones en materia de innovación, combatir el "índice de abandono escolar prematuro, que sigue siendo excesivamente alto" y reducir las desigualdades educativas entre Comunidades Autónomas.