Toda la maquinaria socialista al servicio de Reyes Maroto. La plana mayor del Consejo de Ministros bajaba este sábado de Moncloa a La Nave de Villaverde para empujar a la aspirante del PSOE a la Alcaldía de la capital.
Hasta 7 titulares de carteras se unían a Pedro Sánchez para apuntalar una candidatura que recupere el favor de los madrileños, que en las últimas elecciones los relegaron a 4ª fuerza política en el Ayuntamiento. Con el acento en atenuar "las brechas" de la ciudad, Maroto ha priorizado "reducir la pobreza y la desigualdad" si desaloja a José Luis Martínez-Almeida de Cibeles. "Madrid tiene que quitarse el freno de este Gobierno triste", ha enfatizado desde la tribuna.
Inauguraba el acto, abierto a la militancia, el secretario general del PSOE-M y candidato a la Asamblea de Madrid, Juan Lobato, que 'vendía' a Reyes Maroto como garantía de "solvencia, capacidad y gestión". "Que lo pregunten en Palencia, donde gracias a su visión política se ha conseguido salvar las fábricas de galletas mientras PP y Vox estaban más preocupados por limitar los derechos de las mujeres", manifestaba rememorando la mediación de la ministra de Industria, Comercio y Turismo para la supervivencia de las tres plantas del grupo Siro en Castilla y León.
"Reyes no solo conoce los problemas, sino que aporta soluciones y así salvó 1.700 empleos en Palencia", apostillaría después el propio Pedro Sánchez. El presidente ha retrotraído a los presentes a 2019 para recordar cómo fichó a Reyes Maroto cuando formaba el Gobierno a contrarreloj tras la moción de censura a Mariano Rajoy.
"Tuve dos o tres días para organizar el Consejo de Ministros y la llamé, era diputada en la Asamblea y estaba viendo por dónde podía plantear propuestas de Sanidad para los Presupuestos de la Comunidad de Madrid, que continúa siendo una de las tareas pendientes el Gobierno autonómico". A esos tres años de experiencia de la candidata en la política (regional) madrileña, le suma Sánchez que su elegida para encabezar la lista socialista "aporta gestión, convicción, compromiso social y que da la cara, rinde cuentas y siempre encuentra soluciones".
Maroto, que asume un reto en el que hace apenas medio año parecía pertenecer a Mercedes González o Mar Espinar, ambas entre el público, ha reivindicado que viene "examinada de casa, y me atrevo a decir que con buena nota". "Me considero con la capacidad suficiente para gestionar este camino", ha manifestado. La empresa no se antoja fácil, pues debe remontar la sangría de votos que arrastra el partido en Madrid desde hace dos décadas, dejándose en los últimos comicios hasta 140.000 con respecto a 2011. Con todo, esta vallisoletana que llegó como estudiante a Madrid hace 26 años confía el poder del PSOE, "un partido centenario que transformó Madrid en los años 80 -con Tierno Galván de alcalde- y que lo volverá a hacer desde el 28 de mayo".
Los madrileños, ha dicho, incluyéndose, "estamos orgullosos de nuestros barrios, de nuestra historia, pero en los últimos años Madrid está perdiendo muchos puestos en rankings internacionales, como el de The Economist, en el que hemos bajado 24 puestos en calidad de vida". "No es casual", ha seguido, responsabilizando a quienes dirigen la ciudad de "ser la cara de la intolerancia, el antifeminismo y del negacionismo climático".