Ziarreta, cuya candidatura como cabeza de lista por Vizcaya no ha salido adelante al corresponder los dos escaños obtenido por su partido a Álava y Guipúzcoa, reconoció que "no hemos sabido transmitir lo que estábamos planteando" y lamentó que la sociedad no haya "entendido" la apuesta por concurrir en solitario a las elecciones.
A su juicio, tampoco ha sido comprendido el compromiso de EA con la configuración de "un polo soberanista", objetivo del que aseguró que "es algo necesario y que habrá que construir si no es a corto a medio plazo".
Por el contrario, aseguró que el candidato del PNV, Juan José Ibarretxe, "ha obtenido un magnífico resultado", por lo que felicitó por haber resultado "vencedor" en las elecciones.
Según manifestó, "la solución al principal problema que tenemos como pueblo, la falta de paz y normalización política, va a tener que venir de esa unión de los abertzales soberanistas de Euskal Herria, que somos muchos y que estamos ahí". En esta línea, afirmó que los resultados de las elecciones, que arrojan una mayoría parlamentaria para las llamadas fuerzas constitucionalistas, "no reflejan la realidad de este país".
"Los resultados son malos, no para la dirección, pero son malos para mí como presidente", reconoció, por lo que explicó que ha puesto su cargo "a disposición del partido". Según explicó, EA convocará para el mes de abril un congreso extraordinario en el que se elegirá a la nueva dirección, de la que dijo que "lo hará seguramente mejor que ésta". Ziarreta destacó que este nuevo equipo directivo deberá "afrontar los retos importantes que tenemos como partido y como país", ya que "el panorama que se dibuja es un ciertamente complicado".
Tras agradecer el trabajo de los militantes, señaló que "se ha trabajado mucho y creo que bien" y consideró que aunque "en algún sitio hemos fallado", el error no ha estado en la labor de las bases. "Las razones habrá que buscarlas en otros lugares, y mañana en la Ejecutiva Nacional se hará el análisis pertinente", añadió.
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