Venezuela y Brasil aplazan nuevamente acuerdo para refinería binacional

El encuentro sirvió para firmar una prórroga por 60 días de un Contrato de Asociación firmado por los dos países el año pasado y que expiraba el 26 de marzo, para poder extender por más tiempo las negociaciones sobre la refinería, según un comunicado divulgado por la petrolera brasileña Petrobras.

En la cita, que se extendió hasta altas horas de la noche del jueves, participaron el ministro de Minas y Energía de Brasil, Edison Lobao, y su homólogo de Venezuela, Rafael Ramírez, que también es presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA).

También estuvo presente el presidente de Petrobras, José Sergio Gabrielli.

Las negociaciones para construir la refinería binacional Abreu e Lima comenzaron en 2005, pero algunas divergencias han impedido que los dos países firmen el acuerdo final.

Ante la falta de un acuerdo, Petrobras decidió iniciar el año pasado unilateralmente las obras de construcción de la planta, ubicada en el Complejo Portuario de Suape, a pocos kilómetros de Recife, la capital de Pernambuco.

Pese a la falta de acuerdos, en la reunión "fue confirmado el interés de los dos países en la continuidad de los intentos para hacer viable el proyecto de la refinería", según Petrobras.

En declaraciones a la estatal Agencia Brasil, el ministro brasileño dijo que hay voluntad para llegar a un acuerdo antes de la reunión que los presidentes de ambos países, Luiz Inácio Lula da Silva y Hugo Chávez, tendrán en el estado de Bahía el 26 de mayo próximo.

La vigencia del Contrato de Asociación, prorrogada ayer por dos meses, vence precisamente el día de esa reunión presidencial.

Lobao afirmó que ambos países decidieron crear comisiones mixtas para estudiar los problemas de naturaleza legal que impiden la conclusión de las negociaciones.

Por ahora está acordado que Petrobras tendrá un 60 por ciento de participación en la refinería y PDVSA el restante 40 por ciento, y que ambas se distribuirán, según su parte, las inversiones por 4.500 millones de dólares necesarias para el proyecto.

Las dos partes aún no se han puesto de acuerdo sobre si PDVSA podrá comercializar en Brasil, como distribuidora independiente, la parte que le corresponda en la producción de la refinería.

"La legislación permite la actuación de PDVSA como distribuidora, pero la empresa tendrá que someterse a las reglas internas brasileñas, que exigen una licitación", explicó el ministro.

Tampoco ha sido definido hasta ahora el precio que la empresa binacional pagará por el petróleo que le suministren tanto PDVSA como Petrobras.

"Hay algunos problemas sobre los cálculos necesarios para efectos de pago del petróleo venezolano. Venezuela tiene reglas legales internas que están en conflicto con las de Brasil", dijo Lobao.

Según lo previsto por los dos países, la refinería binacional entrará en operación en 2010 y procesará 200.000 barriles de crudo pesado por día, la mitad de ellos procedente de Venezuela.