En tal sentido, González en reunión con el gremio empresarial de Guayana calcularon que durante el primer trimestre de 2009 se registró el cierre de al menos 45 empresas y que además existen otras 30 “que se mantienen en el limbo”, pues desde diciembre no han retomado sus operaciones.
Sostuvo que la deuda entre las industrias de Guayana y los proveedores alcanza 500 millones de dólares “y se incrementa constantemente” y a su juicio, esta situación ha repercutido en el incremento de la tasa de desempleo en la región, contabilizando que a raíz del cierre de algunas factorías se ha provocado la pérdida de 4 mil empleos directos y de 13 mil a 15 mil indirectos.
Los empresarios aceptaron que la situación de “las empresas no venía bien hace 10 años, pero es cierto que se ha empeorado considerablemente y que requiere una urgente atención por parte del Ejecutivo”.
Asimismo, los empresarios señalaron que lo que afecte a Guayana afectará a las empresas del sector y a la economía de todo el país, especialmente el desarrollo de los estados vecinos, por lo que exhortaron al presidente Chávez y al titular de la CVG y ministro de Industrias Básicas, Rodolfo Sanz, a reunirse con todos los actores de la región para establecer la búsqueda de la solución para la crisis de las empresas.