Todos hablan de ello: el
artículo publicado en el diario Gara por Alfonso Sastre, cabeza de la candidatura de Iniciativa Internacionalista al Parlamento Europeo. Sus declaraciones, advirtiendo de que, a este paso, vendrán tiempos de mucho dolor, en lugar de paz, han sido un verdadero despropósito.
Sastre ha provocado la indignación del PSOE, del PP y de los sindicatos policiales. El artículo lo escribió el mismo día en que ETA asesinó al policía
Eduardo Puelles, y adoptó la dialéctica etarra, hablando de un
“conflicto político” y que, de no abrirse una negociación política con la banda terrorista
“vendrán tiempos de mucho dolor, en lugar de paz”.
Sastre calificó de
“respuestas rituales” las reacciones del PP y del PSOE al atentado, y pregunta a los socialistas si van a optar por responder al
“conflicto” por la vía policial o, como dijera el dirigente popular vasco
Carlos Iturgaiz,
“fumigando” a quienes votaron a Izquierda Internacionalista.
“De ser así, Dios nos coja confesados, porque nos esperarían y amenazarían tiempos de mucho dolor en lugar de la paz”, añade.
La portavoz del PP en el Congreso,
Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que se trata de unas
“amenazas intolerables”, y el líder de los populares vascos,
Antonio Basagoiti, pidió a los jueces y al Gobierno que
“actúen ya” contra la formación de Sastre, a la que calificó de
“disfraz político de ETA”. El presidente del PSE de Vizcaya,
José Antonio Pastor, tachó de
“inmoral” a Sastre por lanzar reproches a los demócratas y no a ETA. El dirigente socialista, además de considerar que el artículo puede ser un indicio para la actuación del Gobierno y la Fiscalía, dijo que el dramaturgo
“se ha inhabilitado” como demócrata y como persona al no formular ni al más mínimo reproche a los terroristas tras el asesinato de Puelles.
El portavoz del Sindicato Unificado de Policía,
José María Benito, pidió que se promueva la ilegalización de Izquierda Internacionalista porque, en su opinión, lo dicho por Sastre
“no está dentro del marco de la Constitución, es una barbaridad y un apoyo clarísimo a ETA y a sus postulados”. Por su parte, la Confederación española de Policía anunció que encargará a su gabinete jurídico que estudie si cabe denunciar a Sastre, por
“si se pudiera entender que está cometiendo un delito de amenazas amparado en un falso derecho de libertad de expresión”.