El 85 por ciento de los trabajadores del Ritz secundan la segunda jornada de huelga

Para el sindicato, el seguimiento ha sido similar al de este jueves, en el que igualmente no trabajaron 221 de los 260 empleados de la plantilla. El presidente de la cadena hotelera estadounidense Orient-Express y su director financiero han mantenido una reunión este viernes con el portavoz del comité de empresa de CC.OO, Santiago Glodosindo, que presentó las propuestas de los trabajadores "y sin más se ha dado por finalizado el encuentro, sin ninguna propuesta por parte de la dirección", indicó el sindicato.

Los trabajadores permanecían concentrados en la puerta a expensas de lo que sucedía en dicha reunión. Entre las 08.30 y las 10.30 horas los empleados no pararon de pitar y de protestar para conseguir la readmisión de 17 trabajadores despedidos recientemente.

CC.OO. insistió en que la solución "pasa por sentarse en una mesa para abordar la situación, pero la empresa continúa sin facilitar información económica ni acreditar las causas de los despidos". El Comité de Empresa ha anunciado que las movilizaciones continuarán el día 30 de septiembre, con una nueva concentración entre las 08.30 y las 10.30 horas.

Readmisión
La dirección del Hotel Ritz reiteró que la huelga tiene las mismas causas que la convocada en los días 14 y 15 de julio, siendo la readmisión el objetivo primordial y último de la misma.

La Compañía aseguró seguir estando abierta y dispuesta a encontrar parámetros comunes para el futuro, "pero en ningún caso puede retomar conversaciones en las que la readmisión de los despedidos sea condición ineludible para entablar el diálogo, puesto que es la jurisdicción laboral la que se tiene que pronunciar sobre dichos despidos, estando pendientes de que se dicte la correspondiente resolución".

Respecto al seguimiento de huelga, la dirección del Ritz indicó que este jueves fue secundada por el 42 por ciento de la plantilla y este viernes por dos puntos menos. Para evitar los ruidos de los manifestantes concentrados en la entrada, el hotel decidió cerrar la terraza para no molestar a los cliente.