Gran parte de los planes de recuperación de Izquierda Unida pasaban por la fortaleza de la organización en Madrid, pero ahora todo se ha ido al traste, según medios críticos a la actual dirección de
Cayo Lara, en IU, y de
José Luis Centella, en el PCE, que interactúan en una estrategia conjunta sin fisuras.
Los planes pasaban por un impulso de la formación de izquierdas en las próximas elecciones municipales y autonómicas, pero aumentando más donde más posibilidades había: Madrid. Las estrategias que se habían perfilado partían de la base de que la presidenta autonómica,
Esperanza Aguirre, estaba en sus momentos más bajos en cuanto a apoyo de la dirección nacional del PP. Y que el alcalde madrileño,
Alberto Ruiz-Gallardón, hasta ahora imbatible, atravesaba también sus peores momentos internos –en el PP- y externos –el enorme enfado de los madrileños por sus obras y enormes deudas, que intenta arreglar con la subida de impuestos, medida impopular donde las haya-.
Por el contrario, según el análisis de IU, el PSOE, que estaría en una inmejorable situación para intentar ganar la ‘batalla de Madrid’, va a presentar como candidatos, sin embargo, a dos figuras de bajo perfil:
Tomás Gómez para la Comunidad y un desconocido total -a designar aún- para el Ayuntamiento madrileño.
Luego, las posibilidades de ascenso de IU eran teóricamente inmejorables en la comunidad madrileña. Pero
Gregorio Gordo y
Ángel Pérez han tirado por la borda esas posibilidades al querer presentarse ellos a las elecciones y desplazar a
Inés Sabanés, una ‘histórica’ que, efectivamente, causa rechazo interno, pero que según sondeos propios está bien vista por determinado electorado de izquierdas.
Estos sectores críticos creen, por tanto, que la ‘batalla de Madrid’ se ha perdido para IU incluso antes de empezar a librarse.
Si (
No(
