El PSOE envía una carta a los europarlamentarios diciendo que "Mayor Oreja miente"

El contenido íntegro de la carta es el siguiente:

"La lucha contra el terrorismo es, para España, un objetivo central. Acabar con la violencia y detener a los miembros de la banda terrorista es la tarea más importante de la democracia española.

"Los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado y los responsables políticos del Ministerio del Interior, con el apoyo de los partidos políticos y de toda la sociedad española están haciendo posible que vislumbremos un final próximo a tanto dolor, a tanta sinrazón.

"Será el éxito de todo un país, de sus distintos gobiernos y de todos aquellos países amigos que nos acompañan en esta lucha.

"La cooperación internacional, especialmente con Francia y Portugal, pero también con otros países europeos y latinoamericanos es más intensa y fructífera que nunca. Por eso la banda terrorista está más aislada que nunca y es posible soñar con el final de esta pesadilla.

"Mientras esto sucede y el mismo día en que el presidente español, Rodríguez Zapatero, y el presidente francés, Nicolás Sarkozy, enterraban a la última víctima de ETA –la primera francesa-, el presidente del Partido Popular español en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja, emitía falsedades y calumnias en un desayuno informativo:

"- “Tengo la certeza de que el Gobierno está negociando con ETA, y que la organización terrorista va a ayudar a Rodríguez Zapatero a ganar las elecciones generales porque no son adversarios, sino aliados potenciales, y los dos buscan una "España debilitada". Hay hechos, síntomas y actitudes.

"- "Se trata de que ETA se haga presente en los ayuntamientos e instituciones del País Vasco, de manera que en una segunda parte, ETA devolvería el favor a Zapatero para ayudarle a ganar las elecciones".

"Las afirmaciones de Mayor Oreja son falsas y sólo buscan hacer daño al Gobierno en su tarea de acabar con el terrorismo de ETA. En el contexto de las dificultades impuestas por la exigencia no sólo de unidad entre los partidos políticos sino de tenacidad en la lucha contra el terrorismo de ETA, resulta singularmente incomprensible e intolerable que quien ha sido Ministro del Interior del Gobierno de España se permita darle a una organización terrorista categoría de actor político. Esto lo hace al atribuirle una demencial concertación de voluntades con el Gobierno democrático de España, bajo la argumentación delirante de que una organización terrorista tendría un plan para ayudar a ese Gobierno a ganar las elecciones. Ello equivaldría nada menos que a presuponer una racionalidad política a una organización criminal debilitada y acorralada".