¿Cómo son los bogotanos?

El informe revela que el 50% de los bogotanos encuestados nacieron en la capital, pero sus padres son de afuera. Así mismo, el 61% de los bogotanos aseguran querer incondicionalmente a su ciudad y sentirse orgullosos de ella, tanto así que el 40% por ciento se encuentra a gusto en su barrio y en su localidad.

En cuanto a lo que esperan de su ciudad, el 77,1% de los bogotanos creen que la ciudad ha cumplido sus aspiraciones de educación, mientras que el 67,4% se sienten satisfechos con la oferta de vivienda.

Además, el 59,7 por ciento creen que sus derechos están más garantizados que antes, frente a un 34,2 por ciento que no lo cree. En el mismo contexto, el 21,71% de los ciudadanos creen que los políticos son las personas que más atropellan sus derechos, seguidos de los funcionarios públicos (21,19%), y de los agentes del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), la Policía y el Ejército con el 19,52%. 

De igual forma, el 66% de los capitalinos consideran que los parques y espacios públicos cercanos son amplios, y el 61% agrega que además son agradables. Poco más de la mitad de los habitantes (51,6%) reprocha el hecho de que algunos barrios y conjuntos residenciales cierren el espacio público para protegerse.

De otro lado, el 66% de los bogotanos cumple las normas “porque hay que hacerlo”, así les resulten absurdas. El 31% cree que ser buen ciudadano es cumplir leyes y normas de convivencia.

El 62% afirma que las mascotas que ensucian lugares comunes o hacen mucho ruido son el problema más frecuente en el vecindario. El 49% opina que son los vecinos que sacan la basura a deshoras y la dejan frente a la casa de los demás y el 46% se refiere a los que ponen música a todo volumen.

También genera tensión, para el 43,83% de los entrevistados, las personas que parquean carros en los andenes o frente a los garajes de otros, así como los borrachos que agreden a los demás o pelen entre sí (38,5%).

Así mismo, sólo el 10% de los bogotanos confía en sus compañeros de  trabajo, mientras que el 9% lo hace en sus vecinos; en este sentido, el 27,92% en ocasiones ayudan a quienes viven cerca de su casa, el 21,03% les colabora siempre y el 20,06% casi siempre. En contraste con lo anterior, el 58,735 de los capitalinos confían totalmente en su familia.

Al preguntárseles qué tipo de personas no les gustaría tener como residentes más próximos, el 21% por ciento contesto que no le llama la atención vivir junto a personas que hagan política, desplazados (10%) y homosexuales 24,49%.

Frente estas últimas personas, cuya condición sexual es diferente, el 41,4 % de la población no está de acuerdo con que se les permita ser educadores en colegios y en un total desacuerdo se encuentra el 15,86%. El 32 % sí cree que pueden ser maestros.

En este sentido, Marcela Sánchez, directora de Colombia Diversa, expresó: "Es increíble que persistan estos imaginarios negativos sobre lo que es ser homosexual, los consideran indeseables; desconocen la realidad. Faltan políticas educativas y culturales en este sentido".

En cuanto al tema de oportunidades, el 59% y el 49% de los habitantes consideran que los enfermos de SIDA y quienes fueron drogadictos respectivamente, deben tener las mismas oportunidades.

De otro lado, el porte de armas no es bien visto por el 75,73% de los ciudadanos, quienes piensan que debe prohibirse su tenencia aún con salvoconducto. Además, frente a las situaciones que motivarían cargar un arma, casi el 70% opina que por ningún motivo lo haría, en cambio el 11% la llevaría en caso de estar amenazado él o su familia y el 8,44% para protegerse de los delincuentes.

En relación a lo anterior, el experto en seguridad urbana Jerónimo Castillo, afirmó: "Creo que esa cifra es positiva, pues muestra que el discurso contra el porte de armas ha calado y la encuesta es contundente en esto".

El 50,13% piensa que cuando la gente es pobre es más propensa a cometer delitos. A este respecto, Castillo agregó: "Si no avanzamos en la construcción de una justicia social, vamos a tener problemas".

Con relación a la violencia y la delincuencia, el 33,4% de los bogotanos coinciden en que éstas disminuirían si existiera una mejor educación. Así mismo, más del 50% de los habitantes capitalinos dejaron en claro su machismo al considerar que la formación de las niñas es una característica determinante a la hora de generar un buen desarrollo en el rol de madres y esposas en las mujeres.

En cuanto a temas polémicos como el aborto, el 48,4% considera que éste debe ser prohibido totalmente, mientras que el 32 opina que eso debería ser una decisión libre de la mujer. De otro lado, la mayoría de los bogotanos se califican como devotos en la religión y como apáticos en la política.

En respuesta a actividades culturales y recreativas, el 32,9% expresó su preferencia por la música y el cine, lo que los conlleva a tener cierta permisividad con la piratería de música, películas y hasta libros.

Finalmente, los capitalinos reconocen que Monserrate y Transmilenio son íconos y símbolos de la ciudad.

Los resultados del revelador estudio serán sometidos a un análisis de expertos extranjeros que evaluarán el pensamiento bogotano.