El PP pide a Revilla que se "calle" porque es "tan mal gestor como Zapatero"

   El líder de la oposición achacó los recortes a un "Gobierno desastroso" y al presidente "más incompetente de la historia de la Democracia", un "iluminado" que no ha dado "a torcer el brazo hasta que le han obligado" y, además, "desde fuera" del país, lo que es "bochornoso", insistió.

   En rueda de prensa, Diego se refirió también a las declaraciones del presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla (PRC), quien considera "imprescindibles" las medidas anunciadas por Rodríguez Zapatero. Unas palabras que producen "estupor e indignación" a Diego, quien opinó que el regionalista se debería "callar" porque es "tan mal gestor como Zapatero", porque "peor es imposible". "Son dos gestores desastrosos, dos demagogos sin escrúpulos, dos populistas ineficaces y dos incompetentes sin parangón", apostilló.

   A juicio del dirigente 'popular', el Gobierno regional es "un calco" del Ejecutivo central, y consideró también ambos presidentes han caído en los mismos "vicios", entre los que enumeró los "desastrosos resultados" de la política de gasto y el déficit público.

   En opinión de Diego, Revilla y Zapatero son "los peores gestores de la Historia" que han llevado a los cántabros y españoles a ser "un 20% más pobres", ya que el primero "ha hecho todo a imagen y semejanza" del segundo.

   En clave nacional, Diego opinó que la "incapacidad e incompetencia" de Rodríguez Zapatero y el PSOE han puesto "en jaque" al Estado, al tiempo que son responsables de "uno de los retrocesos más importantes del Estado de Bienestar". Por ello, confió en que el Gobierno no vuelva a definirse como "el más progresista de la historia".  

   Añadió que el "primer plazo" de la situación creada lo van a "pagar" los funcionarios --a quienes se recorta un 5% su salario--, los pensionistas --por la congelación de las pensiones-- y las madres embarazadas --por la retirada del 'cheque bebé'--, pero también el resto de la sociedad, desde los usuarios de la administración a los trabajadores, pasando por enfermos.