La presidenta eligió un marco de consenso entre dos continentes, el de la Cumbre, para lanzar sus dardos envenenados, entre ellos la siguiente perla:
"los derechos humanos no son privativos de un país y así lo entendió España que permitió que el mismo juez juzgara a Pinochet y a Scilingo", mientras
Van Rompuy y
Duarao Barroso ponían cara de circunstancias. Un mensaje fuera de lugar y bajo una mirada mediática –debido a la cantidad de medios de comunicación presentes-, que a buen seguro fue utilizada con usura por
Kirchner.
El increíblemente (mal) trato a la prensa
Ha sido lo más comentado, lógicamente, entre los medios de comunicación en la jornada inaugural de la cumbre entre la UE y América Latina. La organización ha tratado muy mal a la prensa, no dejándola trabajar prácticamente. No es una apreciación subjetiva: lo que ha ocurrido es que los periodistas han sido ubicados en otro pabellón, en una especie de 'gueto', alejados y aislados de todos los eventos políticos que tenían lugar en otro de los 'hangares' del IFEMA, donde se celebra la Cumbre. Con este panorama, fue imposible dar una cobertura correcta, tal y como los ciudadanos de Europa y América Latina demandan para conocer lo que sus jefes de Estado tratan estos días.
Evo Morales, el otro 'broncas' internacional
Junto a
Chávez,
Evo Morales encabeza el ranking de mandatarios internacionales que se dedican más a alterar la diplomacia mundial con sus salidas de tiesto que a solucionar problemas. El venezolano es experto en provocar a EEUU y a quien se precie, como cuando la tomó con
Aznar. Con razones o sin ellas, no hizo las acusaciones de forma correcta, primero acusándole de incentivar el intento de golpe de Estado que le pudo derrocar hace unos años y, hace poco, llamándole
"fascista". Eso generó el famoso incidente con el Rey y el
"¿por qué no te callas?".
Ahora
Evo Morales parece que asume la 'vicepresidencia' de los mandatarios im-presentables, como también nos hicieron ver nuestros lectores en la anterior convocatoria de los Premios Im-presentables internacionales de 2009, junto a otras 'joyas' como el iraní
Ahmadinejah. Y es que el boliviano acaba de acusar al PP, sin aportar documentos u otras pruebas, de financiar un intento de golpe de Estado contra su gobierno. Entre eso y las críticas a comer pollo, se está sembrando don
Evo...
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