Tras el anuncio de Barcina sobre la negativa de su voto, Jiménez ha asegurado que la abstención es de "cobardes" y que con el voto en contra "habría dificultades".
Para el líder socialista, la responsabilidad "se ejercita votando, apoyando unas medidas que como país necesariamente tenemos que abordar por duras que sean". Roberto Jiménez ha recordado a los regionalistas que su partido está poniendo "todo de su mano en Navarra en situaciones complicadas; por ello, entiendo que ellos tienen que hacer lo mismo".
Ayer, UPN aseguraba que desconocían si se abstendrían o votarían en contra del decreto. Jiménez ha señalado que "me parecería dramático que no se tuviera una posición a estas alturas porque nada va a cambiar de ayer al jueves". Por ello, ha pedido "transparencia" a los regionalistas.
"Hay que pedirle a UPN que sea consecuente. 24 horas antes de que el presidente Zapatero presentara las medidas, Sanz dijo que había que tomar medidas aunque fueran dolorosas". "Que sean consecuentes, so pena que tengan una distorsión entre Gobierno y partido y eso me parecería especialmente preocupante", ha añadido.
Jiménez ha señalado que es el momento de "ser responsables.. No es el momento de partidismos, que puedan llevar a pensar que suponen mejoras electorales". El líder socialista se ha referido a la posición de su partido "ante la reserva temporal por parte del Gobierno foral de 100 millones de euros, que se debe a que hay un déficit estructural en los Presupuestos de otros 100 millones".
Según Jiménez, la reserva de los cien millones va a ser "dura y no es fácil. Y no va a salir de gastos protocolo, ni saldría reduciendo consejerías...". Respecto a qué partidas puden afectar, Jiménez ha asegurado que "los pilares del estado del bienestar no se van a tocar; no se pueden resentir". En este sentido, ha añadido que todavía los borradores son "muy básicos". "A los navarros hay que decirles la verdad, se han acabado las vacas gordas y tenemos que apretarnos el cinturón", ha concluido.
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