'Mosqueo' con CIU por un trato de favor a las constructoras morosas

Autónomos y pymes andan mosqueados con los grupos parlamentarios y en especial, con CIU como posible inspirador de la modificación, por un posible trato de favor a las cosntructoras en el proyecto de Ley de Morosidad. Los grupos parlamentarios del Senado ultimaban anoche una enmienda transaccional transitoria que concedería una salvedad a los contratos de obras públicas. De incluirse esta salvedad, la ralentización en los pagos afectaría especialmente a las subcontratas, es decir, pymes y autónomos que trabajan con constructoras y ayuntamientos.

El sector público podría, gracias a esta modificación, tardar 120 días en pagar a las constructoras las certificaciones de obras, lo que supondría hacerlo 70 días más tarde de los 50 que estipulaba para las administraciones en 2011 el texto legal que salió del Congreso hacia el Senado. En 2012 el plazo se reduciría a 90 días, en 2013 a 60 días y en 2014 al definitivo de 30 días. A su vez, las empresas adjudicatarias de esas obras podrían, a su vez, beneficiarse del mismo plazo de pago a sus subcontratistas. Es decir, las constructoras podrán estirar en 35 días sobre lo estipulado su plazo de pago.