Caixa Laietana, la entidad de crédito de Mataró, no ha tenido ningún escrúpulo en integrarse en el sistema de protección institucional (SIP) que lidera Caja Madrid. O sea que no ha sabido encontrar un socio entre las cajas catalanas y se pasa, sin ningún escrúpulo, a la órbita del gobierno de la Comunidad de Madrid bajo el mando de Esperanza Aguirre y de Rodrigo Rato.
Como mínimo sorprende que uno se llene la boca de catalanidad y de cercanía a los impositores y después se deje abrazar por el oso y hasta por el madroño.
Caja Madrid es la misma que participa mayoritariamente en la compañía aérea Iberia que ha reducido El Prat a un aeropuerto regional para sus vuelos y el gobierno de Esperanza Aguirre es el mismo que luchó denodadamente para que Gas Natural -bajo la órbita de la Caixa- no se hiciera con el control de Endesa. ¿Recuerdan aquella expresión de la presidenta "de fuera de España"?
Bon profit, Caixa Laietana!