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SELECCIÓN NACIONAL.- El haber calificado de esta manera nos deja un mal sabor de boca.  Quizá deberíamos estar contentos por tener el pase a la siguiente ronda, pero tenemos que ser un poco analíticos para saber que se dio un pésimo juego.

No podemos caer en el error de volvernos porra oficial cuando se gana y los críticos destructivos cuando se pierde, pero creo que esta vez se dejó pasar la gran oportunidad de dar un golpe de autoridad y dar el salto a primeros niveles.

Si el partido se ganaba no hubiera sido tanto por evitar a Argentina, mas bien era demostrar que el encuentro contra Francia no había sido una casualidad provocada por el mal momento que vive esta selección, era que el mundo supiera que se aprendió a ganar a potencias y se le vuelve a ganar al que nos toque.

Criticar la alineación es repetir el papel del pueblo en el que todos somos técnicos, pero tener al mismo tiempo a dos jugadores de poca condición física como Franco y Cuauhtémoc en un encuentro en el que la característica iba a ser el desgaste y el choque cuerpo a cuerpo fue el principal error, habíamos venido controlando la media cancha en los dos juegos anteriores con tres contenciones como Efraín, Torrado y Márquez dando un buen resultado, ¿Por qué hoy no se hizo lo mismo? La prueba fue que al ingreso de Castro se recupero la media cancha; en el primer tiempo el jugador mas atrevido hacia el frente, buscando espacios y creando la mejor oportunidad de gol fue Guardado, el cuestionar el porque lo sacó es por demás pero queda claro que a Javier Aguirre no lo termina de convencer aunque lo haga en deterioro del propio conjunto.

Uruguay jugó bien a secas, no fuimos arrollados por la histórica garra charrúa, terminaron como saben manejar los partidos echados a atrás, realmente se pudo hacer más para no dejar un alcanzable 1-0.

Enfrentar a la poderosa Argentina nos pone con una nueva oportunidad de cambiar la historia, no buscando la revancha de Alemania 2006, sino con la motivación, en especial para nuestros seleccionados jóvenes llámese Barrera, Chicharo, Juárez, Giovani y Moreno de dar una vuelta de timón a nuestro futbol en mundiales.