Bolaños, el mejor alcalde

El alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva, tiene días “malos, muy malos y peores” a decir del portavoz de la Junta José Antonio de Santiago-Juárez. Respondió así a la pregunta de un periodista relativa a las declaraciones de  León de la Riva en las que dijo que la Junta dirigía más inversiones a otras provincias.

De Santiago-Juárez, que probó el humor del alcalde siendo concejal con él un tiempo, calificó, no obstante, a León de la Riva como el mejor alcalde de los últimos 50 años de Valladolid, incluyendo a su padre, el gran Don Antolín, hombre extraordinario lleno de bonhomía, que fue el titular del consistorio entre 1971 y 1974.

Al mentidero llegan todo tipo de impresiones en este sentido y la mayoría no coinciden con el portavoz de la Junta. Primero: porque son etapas muy distintas; no se puede mezclar el tiempo de la dictadura con el democrático. Segundo: Tomás Rodríguez Bolaños fue mucho mejor alcalde que León de la Riva, en una etapa más complicada, y además no tenía días peores. Y tres: Don Antolín ha pasado a la historia del ayuntamiento de Valladolid por haber sido el creador-impulsor de un hito en Valladolid: la Seminci, entonces llamado Festival de Cine Religioso y de Valores Humanos. León de la Riva si llega a pasar a la historia será por acumular un número incalculable de querellas perdidas y por ese mal humor. Eso sí, para los periodistas es un fenómeno que siempre lleva bajo el brazo un titular. Pena que ahora se haya olvidado de Valdechivillas. ¿O no?