No obstante, en declaraciones a los periodistas, Morlán afirmó que lo que hay que hacer es situar en Valdestillas (Valladolid) un intercambiador para los trenes de alta velocidad que suban con destino a Cantabria, Asturias, País Vasco o Galicia, con el fin de que puedan desplazarse ahorrando tiempo de recorrido.
Para el secretario de Estado de Infraestructuras, las obras de la línea llevan una "marcha normal y no tiene que haber ninguna duda de que los plazos se están cumpliendo, viendo cómo están evolucionando las obras en los túneles de San Pedro o Guadarrama, por lo que podremos cumplir los compromisos sin ninguna dificultad".
La nueva estación del
AVE de Segovia estará en servicio cuando la alta velocidad llegue a Valladolid, a finales de este año, con un presupuesto por encima de veinte millones de euros, incluyendo los viales de acceso. Morlán matizó que "esto va a suponer que el trayecto Madrid-Segovia se va a hacer en apenas treinta minutos, mejorando la movilidad, incluso hemos mejorado el proyecto de la nueva estación, que no tiene nada que ver con la inicialmente prevista, que tenía un presupuesto de 8,5 millones de euros".
En la actualidad quedan las instalaciones de señalización, comunicaciones, rampas y ascensores, así como el acondicionamiento de los andenes, pero todo habrá acabado hacia el próximo verano. Horas antes, Víctor Morlán visitó la variante de San Rafael, del municipio de El Espinar, en la N-VI, que tiene un alto nivel de circulación por el centro del casco urbano de la población, lo que provoca las protestas de los vecinos. Morlán aseguró que, en los próximos días, aparecerá en el BOE la licitación del estudio informativo de la nueva variante, aparte de que se imprimirá celeridad a la tramitación administrativa para dar una solución al problema.