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Salir de ésta

Salir de ésta

domingo 19 de diciembre de 2010, 12:46h
Los sindicatos amenazan con la convocatoria de una nueva huelga general por la reforma de las pensiones si la jubilación se retrasa paulatinamente hasta los 67 años y dicen que esa decisión, que Zapatero podría ejecutar con o sin acuerdo, representa "la frontera entre el acuerdo y el desacuerdo, el conflicto y la paz social". ¿Se van a lanzar Toxo y Méndez a las barricadas? Este sindicalismo representa uno de los aspectos más superados del modelo que tenemos para gobernarnos y que no sirve para solucionar los problemas reales de los ciudadanos. Los sindicatos son necesarios en un Estado moderno, pero unos sindicatos modernos. ¿Cuál es el modelo sindical para mantener el estado del Bienestar en toda su extensión sin modificar ninguna de las premisas que lo deben hacer posible? ¿Qué reivindican? El problema real de la España de hoy es que producimos menos, recaudamos menos a pesar de subir los impuestos, tenemos más parados que nunca, la gente vive más años, consume más sanidad, más justicia, más educación, más prestaciones, queremos más kilómetros de autopistas y de AVE... ¿Cómo se mantiene eso sin mejorar los ingresos, sin tomar medidas?

La jubilación debería ser voluntaria hasta los 70 años mediante incentivos para todo aquel que quiere seguir activo, aportando al Estado y no cobrando de él. Habría que intentar retrasar la edad real de jubilación y limitar al mínimo las prejubilaciones... Pero con 30 o 35 años de cotización no se pueden mantener 90 de expectativa vital, 50 o 60 de ellos improductivvos. Y esos sindicatos que no quieren retrasar la edad jubilación están pactando 4.000 prejubilaciones a los 55 años en CajaMadrid -que además ha recibido importantes ayudas de los contribuyentes para sanear las cuentas- y las han acordado en empresas como la agencia Efe, Telefónica y tantas otras mandando a casa a trabajadores en plenitud que podrían producir capital para todos e ingresos para el Estado en lugar de gasto e improductividad. Los sindicatos no tienen plan, son responsables de la crisis por haberse negado a las reformas y ahora nos quieren llevar al siglo pasado.

"Es progresista modificar las pensiones para asegurar que todos las puedan cobrar y es progresista modificar el mercado laboral para que se pueda crerar empleo", decía este fin de semana, entre aplausos de los compañeros de partido, el secretario de organización del PSOE, Marcelino Iglesias. Pues claro que es progresista, aunque algunos crean que el progresismo es monopolio de la izquierda. Pero deberían ser más prudentes quienes han negado la crisis y rechazado las medidas que ahora aplican por decreto y sin acuerdo social y ahora se presentan como los salvadores.
Y si se es progresista, se debe ser en todo. ¿Es también progresista y solidario que un ex presidente de la Generalitat cobre 120.000 euros de pensión? ¿Lo es también la exhibición del fichaje de un expresidente socialista del Gobierno, ya jubilado, por 130.000 euros anuales como consejero de una empresa? ¿Lo son las pensiones de diputados, senadores y europarlamentarios?¿Lo es el derroche autonómico, la multiplicación de cargos para una misma actividad, que se gaste dinero en un Museo de la boina o en otro del "sokatira, que una comunidad autónoma pague el gasto de 38.000 móviles, que otra "emplee" 2,9 millones de euros en representaciones "diplomáticas" fuera de España? Algo tenemos que cambiar para que los ciudadanos contribuyentes sigan apostando por este Estado para salir de esta crisis.

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