Andreu Mas-Colell critica el "exceso de gasto" del sistema sanitario y propone una reforma estatal

En una entrevista de Catalunya Ràdio, Mas-Colell ha argumentado que "el tema sanitario es absolutamente central" para cumplir los objetivos de reducción del déficit. "A menos que vuelva el crecimiento económico muy pronto, tendremos problemas" con el sistema actual, ha advertido.

Cataluña cierra 2010 con un déficit de al menos el 3,2% -la cifra exacta se sabrá a mediados de febrero-, frente al 2,4% previsto en el pacto entre Gobierno y autonomías en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, que para 2011 pretende reducir el porcentaje hasta el 1,3%.

Según el conseller del nuevo Govern de CiU, "esta sorpresa del déficit excesivo ha sido básicamente por exceso de gasto sanitario. Hemos de sentarnos con el Gobierno central (...) y hemos de ver que tenemos un problema muy serio en gasto sanitario y que se debe hacer alguna cosa".

Al margen de esta demanda de reestructuración del capítulo sanitario, ha descartado que la Generalitat prevea aumentar los ingresos mediante una mayor recaudación tributaria. "No se plantean nuevos impuestos", ha aseverado.

Cataluña necesita 10.000 millones en 2011

Mas-Colell ha explicado que Cataluña deberá buscar financiación en 2011 por un volumen cercano a los 10.000 millones de euros, y que la caja actual de la Generalitat permite afrontar entre uno y dos meses de pagos.

El titular de Economía y Conocimiento ha señalado que ya hay una agenda de emisiones y de búsqueda de financiación para este año, en el que la apelación al crédito "deberá ser importante".

Andreu Mas-Colell ha reconocido que será un año difícil para colocar deuda, tanto para Europa como para España y Cataluña, pero que la Generalitat irá a los mercados "como corresponde". Así, no ha descartado una nueva emisión de bonos para particulares porque es un procedimiento de colocación de deuda "que no hay razón para no utilizar otra vez" y en el que la demanda ha sido muy alta. "Otra cosa serían las condiciones de emisión", ha remachado.

Según el documento sobre el estado de las finanzas de la Generalitat entregado el 24 de diciembre por el presidente saliente, José Montilla, a su sucesor, Artur Mas, Cataluña debe reducir el déficit en 2011 en torno a 2.600 millones. Ello supone una reducción de 3.800 millones en relación al presupuesto inicial de 2010 y de 2.100 respecto al objetivo revisado.

El documento, de 53 páginas, también expone que las necesidades de financiación para 2011 serán de 8.788 millones, incluyendo la refinanciación de la emisión de bonos para minoristas de 3.000 millones realizada en 2010.

Por ello, las necesidades de endeudamiento de la Generalitat en 2011 serán de 6.801 millones, ya que cuenta con una disponibilidad de tesorería de 1.987 millones a cierre de 2010, según el texto.

Boi Ruiz asegura que los seguros médicos privados salvan a la sanidad catalana

Por su parte, el nuevo conseller de Salud de la Generalitat, Boi Ruiz, ha asegurado este lunes que sin el 25% de los catalanes que tienen un seguro médico privado la situación de la sanidad pública en Cataluña sería "dramática", si bien ha insistido en que existe un "grave problema económico" de financiación del sistema.

En declaraciones a la emisora Rac1, Ruiz ha recordado que el sistema sanitario público de Cataluña dedica una media de 1.200 euros por habitante y año para obtener unos resultados finales similares a los de comunidades autónomas que destinan unos 1.600, y ello es posible por el "esfuerzo complementario" de los ciudadanos que tienen un seguro privado.

Ruiz, conseller independiente que antes de llegar al cargo presidía la patronal Unió Catalana d'Hospitals (La Unió), ha precisado que la sanidad privada ha sido hasta la fecha un "elemento paliativo" que ha permitido "flotar" al sistema, aunque será necesario ver cómo se comporta este aspecto a medio plazo con la crisis económica.

El nuevo titular de la conselleria con mayor presupuesto del Govern ha garantizado que la salud será un tema central en la agenda política del ejecutivo de Artur Mas, junto con la economía, porque el sistema requiere reformas estructurales que deben afrontarse.

Para ello ha apostado por reformas que no sean sorpresa y que no se modifiquen "cada cuarto de hora" y, en cualquier caso, "mucha pedagogía" con los ciudadanos para que entiendan que la situación es delicada y debe desvincularse la financiación del sistema de la situación de la economía productiva.

"Tenemos que cambiarlo todo mirando desde la sala de espera", ha precisado, en referencia a la necesidad de implicar a la sociedad en los cambios para tener su aprobación, porque las decisiones pueden tener un "cierto coste".

La reorganización ira dirigida a "gastar de otra forma", según Ruiz, basándose en el análisis pormenorizado de qué cosas son más superfluas, pero no mediante la introducción del copago porque hacerlo afectaría a las clases sociales más golpeadas por la crisis.

Entre las reformas a emprender ha apuntado a la supresión del IVA que pagan los centros por los productos sanitarios, puesto que el sistema se encarece a sí mismo, además de una mayor flexibilidad en la capacidad de compra, si bien ha insistido en la defensa de un "modelo de éxito" como el catalán.

Ruiz ha asegurado que se mantendrán por el momento las "tensiones de tesorería" que han llevado a retrasar algunos pagos al sector concertado, y ha apostado por que las reformas que se lleven a cabo cuenten con la triple sostenibilidad económica, social y política.