CSI-F acusa a CCOO, UGT y Sterm denegarse al pacto para defender las subvenciones y liberados sindicales

El sindicato CSI-F ha acusado a CCOO, UGT y Sterm-Intersindical de no firmar el pacto sobre la Ley de Medidas Extraordinarias para la Sostenibilidad de las Finanzas Públicas para defender las subvenciones y liberados sindicales, así como las inmediatas elecciones sindicales y políticas, entre otras cosas.

　　 En un comunicado interno dirigido a los afiliados del sindicato, al que ha tenido acceso Europa Press, el sindicato CSI-F da a conocer "otros asuntos se estuvieron negociando con el Gobierno regional en las reuniones" con la intención de que los empleados públicos "puedan entender la divergencia de posturas de las organizaciones sindicales".

　　 Así, desde su punto de vista anunció que las verdaderas razones o "líneas rojas" que han impedido que otros sindicatos firmaran la modificación de la Ley son, en primer lugar, las subvenciones sindicales.

　　 Si de verdad UGT, CCOO y Sterm hubieran querido derogar esta Ley, CSI-F se pregunta "por qué no han querido renunciar a los millones de euros que estos sindicatos reciben anualmente en subvenciones del Gobierno regional y destinarlos en favor de los empleados públicos".

　　 Así, recuerda que CSI-F propuso, en el transcurso de la negociación, que la partida económica de decenas de millones de euros que el Gobierno regional concede anualmente en subvenciones destinadas a los sindicatos y otras organizaciones "se destinaran, este año, a paliar el recorte de derechos sociales y económicos que la Ley ha ocasionado a los empleados públicos".

　　 Sin embargo, UGT, CCOO y STERM "no apoyaron esta propuesta, dejando claro que a estos sindicatos poco les importa la situación de los trabajadores públicos y su verdadero interés consiste en seguir recibiendo las millonarias subvenciones del Gobierno regional", precisa CSI-F.

　　 AL respecto, asegura que si estos sindicatos hubiesen aceptado la propuesta de CSI-F, la negociación "se hubiera desbloqueado con mayores beneficios para el personal de la Comunidad Autónoma".

　　 A su juicio, la segunda "línea roja" que impidió a CCOO, UGT y Sterm firmar el pacto sobre la Ley fueron los liberados sindicales. De hecho, se pregunta si "es coherente que los sindicatos pidamos al Gobierno regional que por motivos de austeridad económica se reduzca el número de altos cargos y que, al mismo tiempo, UGT, CCOO y Sterm pidan en la negociación que no se les reduzca el número de sus liberados sindicales".

　　 En este sentido, CSI-F precisa que "la reducción del número de liberados que viene recogida en la Ley, y al que se oponen estas organizaciones, implica un ahorro de muchos millones de euros", y se pregunta si los sindicalistas liberados de UGT, CCOO y Sterm por lo que realmente están luchando es por no volver a su puesto de trabajo en la Administración".

　　 Como tercera "línea roja", CSI-F cita la negativa de CCOO, UGT y Sterm a que se eliminen las subvenciones a determinados "chiringuitos" de la Administración regional, que suponen en la práctica una "administración paralela como fundaciones, consorcios y empresas públicas, entre otras".

　　 "Por lo visto, cuando UGT y CCOO tienen participación social en el chiringuito, entonces hay que mantenerlo, y no les importa que nos cueste a las murcianas y murcianos cuarenta o cincuenta millones de euros al año", reprocha CSI-F.

　　 Para CSI-F, la cuarta línea roja son "las inmediatas elecciones sindicales y políticas". Así, recuerda que UGT, CCOO y Sterm, durante el año 2009 y 2010 "renunciaron a la homologación y a la carrera profesional del personal de Administración y Servicios, firmando acuerdos que supusieron desnaturalizar el acuerdo de marzo de 2008, conseguido después de muchos años de reivindicaciones sindicales".

　　 "Estos sindicatos pedían entonces a las trabajadoras y trabajadores de la Comunidad comprensión y confianza ciega en el Gobierno regional, argumentando que la situación económica era muy mala y, por lo tanto, los empleados públicos debían realizar sacrificios y aceptar lo que nos ofrecía la Administración o podíamos quedarnos sin nada", añade CSI-F.

　　 Así, dice que CCOO, UGT y Sterm "tachaban los planteamientos de CSI-F de demagógicos y nos criticaban porque no entendíamos la situación del Gobierno regional. Eran los tiempos felices en los que UGT, CCOO y STERM iban de la mano de la Administración cuan pareja de hecho".

　　 Sin embargo, CSI-F recuerda que en aquel momento "se preguntaba que, si la situación económica era tan deficiente, por qué no afectaba salarialmente también al resto de sectores de la Comunidad".

　　 "Y ahora en el año 2011, cuando la situación económica no es mala si no catastrófica y afecta a todos los sectores; UGT, CCOO y Sterm nos piden que no debemos tener en cuenta la coyuntura económica regional y no debemos llegar a ningún tipo de acuerdo hasta que el Gobierno regional se rinda", asevera CSI-F.

　　 A su juicio, da la sensación de que "la razón última que mueve a estos sindicatos no es otra que la de lavar su cara delante de sus afiliados y las empleadas y empleados públicos, un poco antes de las elecciones sindicales y políticas, y luego "i te he visto no me acuerdo".