El hombre que provocó quemaduras de segundo grado a su esposa en el 15 por ciento del cuerpo, Adrián U., de 43 años, utilizó ácido clorhídrico, una sustancia que también se utiliza como acelerante en las drogas, según informó este martes la Jefatura superior de Policía de Madrid. Los investigadores creen que es ácido clorhídrico por el olor y el contenido, aunque van a realizar unos análisis clínicos para comprobar al cien por cien de qué líquido se trata. El producto es de venta legal y se puede adquirir en establecimientos de limpieza industrial y en droguerías al por mayor.
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía de la comisaría de Parla consiguieron arrestar este lunes a Adrián, acusado de rociar con este ácido a su mujer, Elena U., también rumana de 40 años, que se encuentra ingresada en el hospital madrileño de La Paz en estado grave.
La detención se llevó a cabo en torno a las 22.30 horas en la calle La fuente de Parla, zona cercana a unos almacenes, donde al parecer, el detenido pretendía ocultarse. La Policía sospechaba que Adrián iba a esconderse en Parla porque allí tiene un gran número de amigos y familiares. Según las primeras investigaciones, el agresor y la víctima estaban casados y no existen denuncias previas de maltratos. Según la Policía, tampoco constan antecedentes en España con los datos de filiación existentes del arrestado.
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El suceso tuvo lugar al mediodía de este lunes en la plaza de los Reyes Magos, a la altura del número 11, en el distrito madrileño de Retiro, y a consecuencia de la agresión la mujer sufre quemaduras en la cara, las manos, el tórax y las piernas. Según el relato del hijo de ambos, el marido vertió el contenido de una botella sobre la mujer y después se dio a la fuga, tras forcejear con su hijo.
Un equipo de Samur-Protección Civil se trasladó al lugar de los hechos y aplicó a la herida 'difotenina', un producto que reduce la penetración del ácido corrosivo en la piel, por lo que la gravedad y la profundidad de las heridas se hace menor. Posteriormente, la mujer fue trasladada al Hospital La Paz en estado grave pero estable.
El equipo del Samur también tuvo que atender al hijo de la víctima, de 19 años de edad, que presentaba un esguince de tobillo y algunas contusiones, provocados durante el forcejeo que mantuvo con su padre después de que éste rociase a su madre. El joven fue llevado al hospital Gregorio Marañón con pronóstico leve.
Asimismo, recibió asistencia otra mujer, de 45 años y vecina de la víctima, que se vio salpicada por algunas gotas del producto corrosivo, pero que fue dada de alta en el lugar debido a que las heridas eran muy leves y superficiales.
La agredida presenta lesiones dérmicas profundas producidas por el ácido, que le provocó quemaduras médicas superficiales y profundas en el 10 por ciento de su superficie corporal, "que afectan fundamentalmente a la cara y las manos", según el parte médico facilitado por el hospital este martes por la mañana. La paciente está pendiente de exploración fibroscópica, que se realizará a lo largo del día del martes, para descartar la ingestión o inhalación de dicha sustancia.
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