La Embajada de Estados Unidos en México informó que se tomarán las huellas de los diez dedos para poder otorgar la visa de turistas a su país.
La medida, se informó en conferencia de prensa, se aplicará a partir de mañana en el Consulado de Guadalajara, Jalisco.
Se ampliará esta aplicación a partir del 17 de octubre en el resto de los consulados de EU en México, se informó este mediodía.
En la Ciudad de México se pondrá en marcha este programa a partir del 5 de noviembre.
Con este sistema de seguridad que pretende al mismo tiempo evitar el papeleo a la hora de entregar el documento.
****En manos de la Corte de EU, la vida de 51 mexicanos sentenciados a muerte
Un mexicano condenado a muerte en Texas tiene a partir del miércoles la oportunidad de que la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos determine si procede la revisión de su caso, en una decisión que podría aplicarse a otros 50 de sus compatriotas en condiciones similares.
José Ernesto Medellín y el gobierno estadounidense pidieron a la Corte Suprema que exija a Texas el cumplimiento del fallo de un tribunal internacional que en el 2004 ordenó la revisión de los casos de 51 mexicanos sentenciados a muerte al resolver que Estados Unidos violó el derecho a la protección consultar prevista en la Convención de Viena de 1963.
El caso de Medellín, uno de los 51, implica una combinación de posiciones.
Por un lado, el gobierno del presidente George W. Bush que solicitó el acatamiento de los fallos internacionales como estipula la Constitución.
Por el otro, las autoridades de Texas que invalidaron el planteamiento presidencial.
La Corte Suprema se dispone a escuchar desde el miércoles la presentación de los argumentos iniciales de las partes para decidir si Estados Unidos está obligado a obedecer el fallo de la Corte Internacional de Justicia y si procede la solicitud presidencial de que las cortes estatales revisen sus respectivos casos de los 51 mexicanos que no habrían tenido el derecho a la protección consular.
Medellín fue encontrado culpable de la muerte en 1993 de dos chicas adolescentes.
Cuando fue detenido, la policía le dijo que tenía derecho a permanecer callado y a contar con un abogado, pero no le comunicó que podía solicitar la asistencia del consulado mexicano.
En octubre de 1994 fue condenado a muerte por asesinato en un ataque sexual, delito que conlleva la pena capital en Texas.
Medellín, quien habla, lee y escribe en inglés, había entregado una confesión por escrito.
Las autoridades de Texas reconocieron que Medellín no recibió la información de que podía pedir la asistencia de diplomáticos mexicanos, pero alegaron que perdió ese derecho porque nunca planteó el tema durante el juicio.
De cualquier manera, aseguraron, la intervención consular no habría cambiado el resultado del caso.
Las cortes estatales y federales rechazaron las apelaciones de Medellín. Luego, en el 2003, México demandó a Washington ante la CIJ a nombre de Medellín y de los otros 50 mexicanos por la falta de protección consular cuando fueron detenidos.
México, que no aplica la pena capital, y otros países han recurrido a la CIJ, conocida también como la Corte Mundial, para defender a extranjeros sentenciados a muerte en Estados Unidos.
La CIJ, con sede en La Haya, resolvió en favor de México para que fueran revisadas las condenas a muerte.
Pero Bush retiró a Estados Unidos del tribunal internacional, aunque ahora considera que Texas debe acatar el fallo para evitar que sean perjudicados los intereses estadounidenses en el exterior.
Un total de 152 reos fueron ejecutados en Texas cuando Bush gobernó el estado.
La Corte Suprema analiza ahora el caso denominado Medellín v. Texas, 06-984.
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