El exceso de velocidad en la ciudad se pagará con cárcel

Una vez que la reforma entre en vigor, dentro de las próximas semanas, la primera vez que un conductor supere los límites de velocidad no irá a la cárcel. Sin embargo, recuerda el portavoz de Automovilistas Asociados Mario Arnaldo, será necesario pedir formalmente al juez designado el no cumplir la pena formalmente.

El objetivo principal de esta medida es el de reducir el número de accidentes que se producen y que en 2006 tuvieron como consecuencia un total de 178 fallecidos en la Comunidad de Madrid, de los que 51 perecieron en la capital.

Las penas para los conductores que sean hallados cometiendo este tipo de infracciones variarán entre los tres y los seis meses de prisión,  una multa de entre seis y doce meses y trabajos para la comunidad de 30 a 90 días.

En general, el límite de velocidad para los núcleos urbanos se establece en 50 kilómetros por hora, aunque en ciertos tramos de la M-30 de la capital se eleva hasta los 70 ó los 90 kilómetros por hora.

Fuentes de la Policía Municipal de Madrid indicaron a El Mundo que hay "cientos de personas" que sobrepasan estos límites y que, cada año, los radares del Ayuntamiento ponen 50.000 multas por ir  a más de 110 kilómetros por hora.